Aragonés plantea 5 preguntas sobre un referéndum a los académicos nombrados por su Gobierno para un acuerdo de claridad
Deberán responderlas en un informe a principio de verano y proponer las mayorías para convocar el referéndum y cómo leer el resultado
BARCELONA, 19
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, ha planteado cinco preguntas al consejo de académicos del acuerdo de claridad, nombrados por su propio Gobierno, sobre cómo resolver el «conflicto político catalán» y qué características debería tener un referéndum: «Cinco preguntas para establecer las reglas del juego, para dar respuesta a la voluntad de la ciudadanía de decidir el futuro político del país», ha afirmado.
Así se ha pronunciado en declaraciones a los medios tras reunirse este miércoles por la tarde en el Palau de la Generalitat con el consejo de académicos del acuerdo de claridad, a quien ha entregado estas cinco preguntas.
Aragonés ha explicado que este es «el punto de partida para tener estas bases para incentivar el debate», y ha concretado que de las reuniones del consejo de académicos saldrá un informe a principios de verano, que contendrá las respuestas a estas cinco preguntas.
El presidente ha concretado que estas preguntas son a petición suya, pero las ha formulado de forma consensuada con los académicos que elaborarán el informe «para garantizar la solidez» de las mismas.
LAS CINCO PREGUNTAS
La primera de las preguntas es: «¿Qué características debería incluir un acuerdo de claridad con el Estado español para resolver el conflicto político?», para lo que los expertos deberán identificar la naturaleza del «conflicto» y en qué principios y valores se debería centrar el acuerdo de claridad, han explicado fuentes de la Generalitat.
La segunda, cuestiona al consejo de académicos sobre «qué mecanismos existentes en la política comparada permitirían aportar soluciones al conflicto político», de la que se podrá extraer cómo se han abordado conflictos de soberanía similar en otros lugares del mundo y qué herramientas han sido útiles para ver si podrían ayudar en el caso catalán.
Una tercera cuestión habla sobre qué actores políticos e instituciones deberían tomar la iniciativa para implementar estas soluciones, en referencia a las instituciones del Estado u organismos internacionales, y buscará saber qué papel deben tener en todo el proceso.
El presidente también ha preguntado «qué función debería tener un referéndum sobre el futuro político de Cataluña, u otros mecanismos análogos, a la hora de resolver el conflicto político», de la que se espera una respuesta múltiple del abanico de posibilidades que hay para recoger la opinión pública de la ciudadanía mediante el voto, y cuál sería la mejor para resolver el conflicto catalán.
Por último, la quinta pregunta versa sobre «qué características debería cumplir un referéndum sobre el futuro político de Cataluña, o de otros mecanismos análogos, para contar con la máxima legitimidad e inclusión y asegurar la validez e implementación», donde los académicos plantarán propuestas sobre las mayorías necesarias para convocar un referéndum y cómo se deberían leer el resultado para implementarlo.
Después de que Aragonès se haya reunido con el consejo de académicos para entregarles las preguntas, este grupo de expertos, presidido y coordinado por el académico Marc Santjaume, ha celebrado su primera reunión de trabajo.
SOLUCIONES DE CONSENSO
Aragonès ha explicado que el objetivo de este proceso es buscar soluciones de consenso, para después planteárselas a la ciudadanía y también a una mesa de partidos a los grupos políticos representados en el Parlament, y después poder «defenderlas ante el Estado en el marco de una negociación para resolver el conflicto».
«Se trata de tener esta opinión académica, que se pondrá a disposición del debate político» con los grupos parlamentarios, y ha destacado que este grupo de expertos tienen total libertad para hacer las consideraciones oportunas sobre cómo debería hacerse este referéndum y cómo se debería implementar.
Para poder implementarlo, ha sostenido que es necesario que «las diferentes partes pacten un mecanismo de decisión», tanto los que no quieren independencia como los que sí, ya que considera que mediante unas normas pactadas todo el mundo podrá aceptar el resultado.
CRÍTICAS DEL INDEPENDENTISMO Y DEL PSC
Sobre la posible ausencia del PSC en esta mesa de partidos que el Govern convocará tras conocer el informe de los académicos –el primer secretario del PSC, Salvador Illa, aseguró que no iría a reuniones que fuesen en la línea de dividir–, Aragonès ha afirmado que los socialistas han reivindicado esta mesa durante meses, y ha sostenido que está convencido de que «a la hora de debatir, todo el mundo participará».
Ha explicado que está dispuesto a escuchar e incorporar las propuestas de otras formaciones políticas para resolver el conflicto, pese a que ha insistido en que tiene clara la del Govern: «Si alguien cree que hay otros mecanismos para resolver el conflicto y que se implemente el resultado, estamos dispuestos a escucharlo».
Sobre las críticas de Junts y de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) a su propuesta de acuerdo de claridad, Aragonès ha insistido en que escuchará todas las propuestas de todos los espacios, «pero especialmente del independentista», y ha deseado que todas las formaciones hagan propuestas.
«Cuando quienes presidían eran otros y algunos estaban en el Govern, siempre ha habido voluntad de escuchar. Deberían hacer lo mismo», ha afirmado en alusión a Junts, a quien ha instado a poner una propuesta sobre la mesa si cree que es mejor que la del Govern.
Preguntado sobre por qué las preguntas no mencionan las palabras independencia o autodeterminación , el presidente catalán ha respondido que la propuesta del Govern es un referéndum: «No diremos a los expertos qué deben de incluir y qué no. Este es un conflicto de soberanía y, por tanto, estas soluciones son las que se deben poner sobre la mesa».