Andueza aboga por avanzar en consensos que sean «la base de una convivencia más sólida» con pluralidad de agentes

Afirma que PSE-EE «señalando la injusticia del terrorismo, la responsabilidad de los que lo apoyaron en e

SAN SEBASTIÁN, 27

El secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, ha confiado en que en Euskadi se pueda «avanzar en unos consensos que sean la base de una convivencia más sólida», y ha abogado por políticas de memoria que se apoyen en una «pluralidad de agentes» y abarquen «la complejidad de todo lo sucedido» como base para alcanzar esos acuerdos.

Así, ha subrayado que «la tarea no es imponer una memoria de arriba abajo, donde los gobiernos digan a la gente qué pensar y qué decir sobre nuestro pasado reciente». «Las políticas de memoria, para ser eficaces, deben apoyarse en pluralidad agentes y abarcar la complejidad de lo sucedido, y confío en que en Euskadi seamos capaces de afrontar esta tarea», ha sostenido.

Andueza ha realizado estas afirmaciones en la entrega en San Sebastián, de los premios Oroimen Hegoak, que conceden las Juventudes Socialistas de Euskadi (JSE-Egaz) y que en esta edición de 2022 han reconocido la trayectoria del artista Agustín Ibarrola, del grupo musical La Oreja de Van Gogh y del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo.

En cuanto al acto de los premios, ha mostrado su agradecimiento a los premiados por su «trabajo, compromiso y aportación» que, cada uno desde su ámbito, «hacéis a la convivencia, a la memoria y, en definitiva, a construir un país más sano y decente».

Haciendo alusión a una canción de La Oreja de Van Gogh, Andueza ha destacado que, con la llegada del mes de febrero, «a los socialistas se nos llena la cabeza de sonidos y de recuerdos muy dolorosos». «Enrique Casas, Fernando Múgica, Joseba Pagaza, Fernando Buesa. En febrero intentaron acabar también con Edu Madina y Esther Cabezudo, y después en marzo lo hicieron con Isaías Carrasco, con Froilán Elespe y con Juan Priede», ha recordado.

«Hay heridas que nunca cicatrizan de todo, y las que nos provocó ETA a los socialistas vuelven a abrirse cada mes de febrero y siguen escociendo, por muchos años que pasen», ha insistido, al tiempo que ha defendido la importancia de que, «desde diferentes ámbitos, desde diferentes miradas abordemos la memoria sobre nuestro pasado reciente».

SIN OLVIDAR A LAS VÍCTIMAS

El líder de los socialistas vascos ha apuntado que, pasados diez años desde el final de ETA, «el avance es sustancial y el país es hoy mucho más habitable», ante todo por «la libertad conquistada», pero también por «haber sacado del olvido a las víctimas y haberlas puesto en el centro de las políticas públicas en materia de convivencia». «Hoy contamos con leyes de reconocimiento de las víctimas, en España y en Euskadi, que han sido determinantes para su reparación», ha añadido.

También se ha referido al Centro Memorial de Víctimas y el Instituto Gogora, que están haciendo una «labor fundamental de investigación, difusión y educación en valores». «Hemos promovido normas para reconocer también a otras víctimas, iguales en su sufrimiento, pero distintas en la razón por la que son víctimas», ha destacado.

Asimismo, se ha referido a la reactivación, la pasada legislatura en el Parlamento Vasco, de una Ponencia de Memoria y Convivencia, donde «precisamente fue la voz de las víctimas la que primero llevamos para ser escuchada y donde hubo acuerdos importantes en cuestiones como evitar la humillación de las víctimas, abordar las desapariciones o favorecer criterios humanitarios a los presos de ETA».

Sin embargo, ha lamentado que la Ponencia no consiguió una declaración unitaria sobre el reconocimiento del daño causado. Por ello, ha recordado que en el acuerdo de Gobierno suscrito con el PNV para esta legislatura, los socialistas apelan a «un Pacto Social por la Convivencia que retomase ese objetivo, que profundice en la idea de que ni entonces ni ahora hubo ni habrá razones políticas que justifiquen el terrorismo».

«Un acuerdo de carácter transversal y profundo sentido ético, que busque la verdad de lo ocurrido y se base en el respeto a la pluralidad del país, a la democracia y a los derechos humanos».

Andueza ha aclarado que «no es un acuerdo para sustituir otros anteriores» y tampoco un consenso que «anule el suelo ético que ya fijamos hace años». «Ni pretende sacar a la política o a los partidos de las cuestiones de la memoria. Al contrario. Lo que buscamos es ampliar el foco, es sumar a más actores. Es incluir nuevas miradas y nuevas voces al necesario debate sobre el fin del terrorismo», ha asegurado.

De este modo, ha incidido en que «la tarea no es imponer una memoria de arriba abajo, donde los gobiernos digan a la gente qué pensar y qué decir sobre nuestro pasado reciente. Las políticas de memoria, para ser eficaces, deben apoyarse en pluralidad agentes y abarcar la complejidad de lo sucedido».

LA INJUSTICIA DEL TERRORISMO

En ese sentido, ha asegurado que los socialistas, mientras tanto, van a seguir defendiendo sus principios y trabajando por «la memoria y reparación para las víctimas», así como «seguir señalando la injusticia del terrorismo y la responsabilidad de los que lo apoyaron en el pasado».

«Vamos a reclamar el reconocimiento del daño injusto causado. Vamos a combatir equiparaciones de cualquier tipo. Vamos a defender la pluralidad y la libertad, por la que tantas personas fueron asesinadas en Euskadi, y que es son hoy nuestra mejor herramienta de futuro», ha concluido.

LIBERTAD Y ARTE

Por su parte, el secretario general de JSE-Egaz, Víctor Trimiño, que, como Eneko Andueza, ha condenado el ataque de Rusia a Ucrania, ha señalado que «no hay mejor escenario para la libertad que el arte», al referirse a los premios a Ibarrola y La Oreja de Van Gogh y ha asegurado que los ataques al Memorial «confirman que su labor molesta a los que pretenden el olvido y se resisten a la deslegitimación del terrorismo».

«Las víctimas serán siempre uno de los nuestros», ha afirmado Trimiño, quien ha recordado a los jóvenes socialistas que, «con su compromiso en favor de las libertades, resistieron y vencieron al terrorismo en los años más oscuros de la amenaza de ETA y su entorno».