Andradas aspira a recuperar el «protagonismo» de la UIMP como «faro» y «foro» de la actualidad

Trabaja ya en el diseño de la UIMP 2020-2030, para la que cree que se debe ir «avanzando» en medios humanos, materiales y presupuestarios

El nuevo rector de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), Carlos Andradas, quiere «volver a dar» a la institución «todo el protagonismo que siempre ha tenido, y que tiene que tener cada vez» como «foro» y «faro» en Cantabria de la actualidad y los problemas que afronta la sociedad y ser la «referencia» que ha sido a lo largo de sus casi 90 años de historia, un aniversario que quiere celebrar «por todo lo alto» tras el «periodo difícil» vivido.

Así lo ha afirmado este miércoles en declaraciones a los medios de comunicación tras reunirse en la sede del Gobierno de Cantabria con el vicepresidente regional, Pablo Zuloaga, y la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones, a los que ha expuesto su planteamiento de lo que, a su juicio, «debe de ser y va a ser la UIMP 2020-2030».

Esa «UIMP 20-30» en cuyo diseño ya trabaja, tiene que ser, en su opinión, «ágil», «flexible para acoger distintos tipo de iniciativas», recuperar las escuelas científicas, mantener la actividad de posgrado abierta en los últimos años y «focalizar mucho» en la formacion permanente, ya que, a su juicio, es «algo que cada vez va a tener una importancia mayor» en la sociedad».

También quiere que la institución sea un foro en el que se pueda «debatir» y «discutir con libertad», y «sin más cortapisa que el respeto a las personas y a la Constitución» sobre los temas de actualidad política, científica, cultural, de ideas, de innovación y los problemas fundamentales que afectan a los ciudadanos en distintos ámbitos, algo que, a su juicio, la sociedad «necesita».

«Hay toda una serie de problemas que están y van a cambiar el mundo y ahí lo que hacen falta son ideas, liderazgo, de por dónde hay que ir caminando», ha expuesto Andradas, que se ha mostrado «convencido» de que estos objetivos van a ser «una realidad».

En este punto, Andradas ha agradecido el «apoyo» que está recibiendo de «todos los patronos» de la institución y la «confianza» que están depositando en él desde su nombramiento, que fue publicado en el Boletín Oficial del Estado el pasado 6 de octubre.

El rector ha explicado que en una reunión que mantuvo con el ministro de Universidades, Manuel Castells, éste le transmitió el «pleno apoyo» para esta etapa.

AVANZAR EN RECURSOS

De cara a la «nueva fase» de la institución en su rediseño de lo que debe ser en esta década, Andradas ha reconocido que se debe «ir avanzando» en materia de recursos (humanos, materiales y presupuestarios».

Precisamente, respecto a financiación de la UIMP, el vicepresidente regional ha subrayado que el Ejecutivo «mantiene el compromiso» con la institución académica, el cual –ha dicho– se «traduce en financiación» con la partida que habrá para la Menéndez Pelayo en los Presupuestos de Cantabria para 2022 que están en elaboración.

En 2021, las cuentas de la comunidad destinaron a la UIMP casi 410.000 euros, y cuestionado Zuloaga sobre lo que pasará con la de 2022 (si aumentará o decrecerá), se ha limitado a señalar que «de momento se puede decir que se consolida». «Me alegro de esa consolidación», ha señalado el rector.

Zuloaga ha agradecido a Andradas la «ilusión» y el «entusiasmo» con el que afronta su nuevo cargo al frente de la UIMP y ha asegurado coincidir con él en los aspectos generales «sobre cómo tiene que crecer una institución que, según ha subrayado, es un «referente para los veranos de Cantabria y también a nivel «nacional e internacional»

El vicepresidente regional ha confiado en que, dado que parece que «la parte más complicada» de la crisis generada por el coronavirus «ya ha pasado», los cursos del año que viene, en el que la UIMP cumple 90 años, sean «un antes y un después».

También, en este punto, ha reconocido la labor desempeñada por la precedesora de Andradas en el cargo, María Luz Morán, que, según ha dicho, tuvo que llevar el peso de la institución en dos años «especialmente complejos» por la pandemia.