Anacef "lanza sus redes" a 500 estudiantes canarios para garantizar el futuro de la pesca
/COMUNICAE/
La organizaciones de productores pesqueros pone en marcha la cuarta edición del proyecto «Trabaja en Pesca», destinada a los estudiantes de educación secundaria, que se centrará en esta ocasión en los IES Franchy Roca, La Isleta y EOEP Las Canteras. Desde el inicio de esta iniciativa hasta hoy, la promoción de la actividad pesquera llegó a cerca de un millar de estudiantes canarios
La innegable capacidad poética y épica del mar, unida a su demostrado potencial como sector económico y elemento cultural, deberían convertirlo en lugar de trabajo ideal. Pero la realidad marca que el relevo generacional es difícil, cuando no imposible. Ante tal situación lleva años rebelándose la organización de productores Asociación Nacional de Armadores de Buques Congeladores de Pesca de Cefalópodos (OPP Anacef) a través de la campaña «Trabaja en Pesca», que retoma en este 2023 con energía y con el objetivo de sumar otros 500 alumnos a los 450 que ya han conocido de primera mano el oficio desde 2019, año en el que nació la iniciativa.
Un proyecto divulgativo que ha contado desde sus inicios con el testimonio en primera persona de José Sieira. La trayectoria vital y laboral de este boirense, que pasó por diversos puestos del ámbito pesquero dentro y fuera del barco, volverá a ser el ejemplo vivo de cómo construir una vida plena en torno al mar.
En presencia del viceconsejero del sector primario, Álvaro de la Bárcena, la OP Anacef presentó en el Museo Elder de Las Palmas de Gran Canaria la cuarta edición de un proyecto que ha sido noticia en todo el territorio nacional por su originalidad a la hora de buscar nuevos profesionales. En este 2023, los destinatarios principales vuelven a ser los alumnos y alumnas de educación secundaria -IES Franchy Roca, La Isleta y EOEP Las Canteras-, vehiculizando en este caso la información sobre el amplio ámbito laboral de la pesca a través de un juego. Siempre con José Sieira como padrino atento en el empeño compartido de mostrar las virtudes de las salidas laborales en el sector y de borrar del imaginario colectivo la supuesta excesiva dureza física y económica de la pesca. La intención siempre es mezclar la pasión de la mar con la certeza de un trabajo reglado, seguro y de evidentes beneficios.
«De todos los estudiantes con titulaciones náuticas o relacionadas con mecánica o frío industrial, pocos se dedican finalmente a la pesca», ha señalado de entrada Juan Carlos Martín Fragueiro, director gerente de la organización de productores pesqueros, para poner encima de la mesa la realidad que en su día llevó a los armadores a poner en marcha la iniciativa «Trabaja en Pesca», con la financiación del Fondo Europeo Marítimo de Pesca y de Acuicultura, y el Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación. El responsable de la asociación remarcó que las razones de esta falta de relevo están relacionadas «con la percepción externa de las condiciones sociolaborales y económicas». Por eso, Anacef se empeña por mostrar la realidad a los más jóvenes, a los que darán el relevo a un sector tan trascendente dentro del Productor Interior Bruto de Canarias y Galicia. Porque del mar se puede vivir bien.
Más sobre la Organización de Productores Pesqueros ANACEF
La OPP43 u Organización de Productores Pesqueros ANACEF (Asociación Nacional de Armadores de Buques Congeladores de Pesca de Cefalópodos) se constituyó en 1983 y tiene su sede en Las Palmas, puerto más importante del Atlántico Central. Fue creada con el ánimo de integrar y defender los intereses de los armadores nacionales orientados a faenar en caladeros de África Occidental.
Esta flota desarrolla actualmente su actividad en aguas de Marruecos, Mauritania, Senegal, Gambia, Guinea Bissau, Guinea Conakry y del Atlántico Sur al amparo de acuerdos de pesca sostenible entre los países terceros y la UE o también gracias a acuerdos privados. Los barcos de la asociación capturaban inicialmente especies de cefalópodos como el pulpo o el calamar, pero con el paso del tiempo y los cambios sufridos en los acuerdos pesqueros han ido evolucionando en cuanto a capturas hacia especies pelágicas y demersales como el jurel y la merluza negra.
Fuente Comunicae