(AMP) Iberdrola adjudica a MHI Vestas 84 turbinas para su proyecto de eólica marina en EEUU por 1.200 millones
Vineyard Wind, la sociedad participada al 50% por Iberdrola y el fondo danés Copenhaguen Infraestructure Partners (CIP), ha elegido a MHI Vestas Offshore Wind como proveedor preferente para suministrar las turbinas para el macroproyecto de eólica marina de 800 megavatios (MW) que llevará a cabo en aguas de Massachusetts (Estados Unidos).
Fuentes del sector indicaron a Europa Press que el importe del contrato rondará los 1.200 millones de euros.
Así, la sociedad participada por la energética española se ha decantado por la sociedad conjunta formada por el fabricante danés y Mitsubishi Heavy Industries (MHI) para el suministro de un total de 84 aerogeneradores marinos del modelo V164-9.5 MW , la turbina eólico más potente del mundo, en el proyecto que desarrollará en aguas federales al sur de Martha s Vineyard y a unos 55 kilómetros al sur de Cape Cod.
El director general de Vineyard Wind, Lars Pedersen, destacó que MHI Vestas comparte el compromiso estratégico de Massachusetts de «hacer la energía eólica marina asequible, desarrollando soluciones sostenibles para las futuras generaciones».
«Al reducir el coste de la energía mediante una tecnología fiable y segura, MHI Vestas se ha convertido en el socio perfecto para nuestra empresa y el Estado», añadió.
Por su parte, el director general de MHI Vestas, Philippe Kavafyan, se mostró orgulloso de haber sido la firma seleccionada como proveedor preferente «para el primer proyecto de energía eólica marina a gran escala en Estados Unidos».
«Al traer a Massachusetts la V164-9.5 MW , la turbina eólica más potente del mundo, Vineyard Wind asegura que el Estado contará con la más reciente tecnología, que se adapta perfectamente a las condiciones de toda la costa este norteamericana. Esperamos trabajar con Vineyard Wind para ayudar a Massachusetts a alcanzar sus objetivos climáticos y proporcionar empleos a la región mediante las energías limpias», dijo.
MHI Vestas prevé contratar a más de 100 personas e invertir más de 15 millones de dólares (unos 13,3 millones de euros) en la economía de Massachusetts durante la fase de construcción.
Vineyard Wind continúa tramitando los permisos para iniciar la construcción en 2019 y las operaciones en 2021, tras la adjudicación y firma de contratos a largo plazo entre el promotor y las compañías de distribución eléctrica de Massachusetts.
En un comunicado, la sociedad participada por Iberdrola señaló que cuando el proyecto de Vineyard Wind entre en operación, evitará emisiones de carbono por más de 1,6 millones de toneladas al año en Massachusetts, equivalentes a retirar 325.000 automóviles de las carreteras estatales.
Del mismo modo, durante la vida del proyecto se ahorrarán 3.700 millones de dólares (unos 3.280 millones de euros) en costes relacionados con la energía a la región de Nueva Inglaterra.
ENTRADA DE IBERDROLA EN EL MERCADO OFFSHORE DE EEUU.
El pasado mes de mayo, Vineyard Wind se adjudicó el desarrollo de este proyecto de 800 MW en aguas de Massachusetts, que supondrá una inversión de unos 2.800 millones de dólares (unos 2.400 millones de euros) y que será la entrada de Iberdrola en el mercado offshore de Estados Unidos, marcando así un nuevo hito en su expansión internacional en el sector de las renovables.
Este proyecto forma parte de los objetivos del Estado de Massachusetts para el desarrollo de infraestructuras eólicas marinas en el marco de su Ley de Comunidades Verdes, que prevé la puesta en marcha de hasta 1.600 MW de esta tecnología en la próxima década.
En Estados Unidos, el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán se adjudicó también el pasado año los derechos para desarrollar y construir un parque eólico marino en la zona conocida como Kitty Hawk, en aguas de Carolina del Norte y con un potencial de hasta 1.486 MW.
APUESTA POR LA EÓLICA MARINA.
La eólica marina es una de las apuestas claves de Iberdrola para el futuro, con el desarrollo de su actividad en este negocio ya en países, además de en Estados Unidos, como Reino Unido, Alemania o Francia.
La compañía marcó un hito en 2014 al convertirse en la primera empresa española en proyectar y poner en marcha un parque eólico, el de West of Duddon Sands (WoDS), en la costa Noroeste de Inglaterra, con una inversión de 1.600 millones de libras (unos 1.825 millones de euros) y una potencia de 389 MW.
Posteriormente, abordó el parque alemán de Wikinger, en aguas del mar Báltico, que supuso una inversión de cerca de 1.400 millones de euros y, con una potencia de 350 MW, es el primer proyecto en solitario del grupo ya puesto en marcha en eólica marina.
También en Alemania, Iberdrola se adjudicó el pasado 27 de abril la construcción de dos parques eólicos marinos en aguas alemanas del mar Báltico, que sumarán una capacidad total de 486 megavatios (MW), en la segunda subasta pública organizada por la Agencia Federal de Redes (Bundesnetzagentur). Se trata de los proyectos Baltic Eagle (476 MW) y Wikinger Süd (10 MW).
Además, el grupo trabaja en Reino Unido en East Anglia One, que, con 714 MW de potencia, se trata del mayor proyecto español de la historia en el sector de las renovables y el parque marino más grande del mundo -ocupará 300 kilómetros-, cuando entre en funcionamiento, en 2020, tras una inversión de 2.500 millones de libras (unos 2.852 millones de euros).
Asimismo, ya ha solicitado al Gobierno británico ampliar esta instalación hasta los 2.000 MW. Para ello, ha presentado a las autoridades del Reino Unido una propuesta para construir el parque East Anglia Three, que dispondría de 1.200 MW de potencia.
A estas nuevas instalaciones se sumará la de Saint Brieuc, en aguas francesas, cuya entrada en operación se prevé para 2022. Este parque eólico tendrá una potencia de 496 MW y estará ubicado en la bahía de Saint-Brieuc, frente a la costa de la Bretaña francesa, a 20 kilómetros mar adentro.