Albert Rivera (Cs) propone multar hasta con 300.000 euros a los «cafres» que vandalizan autovías

ALFAJARÍN (ZARAGOZA), 29

El candidato de Ciudadanos (Cs) a la Presidencia del Gobierno de Aragón, Albert Rivera, se ha comprometido este martes a endurecer la Ley de Carreteras para subir las multas a los «cafres» que vandalizan carreteras, realizando cortes ilegales, para que paguen de 15.000 a 300.000 euros «si perjudican gravemente» a los ciudadanos y las empresas.

Ha comentado que la kale borroka terminó en el País Vasco «cuando los de la kale borroka tenían que pagar con sus casas o pidiendo préstamos» para pagar «lo que habían destrozado o el dinero que habían hecho perder».

El presidente de la formación naranja ha visitado la estación de servicio de Rausan, en Alfajarín (Zaragoza), donde se ha reunido con representantes de la patronal del transporte, indicando que Aragón es «el centro neurálgico del transporte» de España y ha lamentado que los transportistas «están teniendo muchos problemas en los últimos años y, especialmente, en los últimos días».

El candidato de Cs ha mencionado las «imágenes lamentables, tristes, en la frontera y en algunas autopistas», como la A-7, «donde, literalmente, unos pocos cafres, unos pocos violentos, condicionan a miles y miles de familias» en su trabajo.

«Si soy presidente del Gobierno me comprometo a que en las carreteras de España no haya ningún violento que las corte, ningún comando separatista que prohíba circular a los que tienen derecho a circular por nuestras carreteras», ha aseverado.

Rivera ha opinado que «es muy difícil acabar con la violencia en las carreteras o con los que cortan carreteras cuando el presidente de la Generalitat es el cortador de carreteras oficial, con el coche oficial», en referencia a Quim Torra.

CORAJE

Así, ha manifestado que «hay que tener más coraje con los gobernantes arbitrarios que con los débiles, hay que tener más coraje con aquellos que se saltan la Ley que con los que cumplen la Ley», añadiendo que «un Gobierno tiene que estar al lado de los que crean riqueza, de los que pagan impuestos, de los que cumplen la Ley, no mirando hacia otro lado, diciendo que no pasa nada cuando algunos cortan carreteras».

De esta forma, se da la «paradoja» de «tener a un presidente autonómico cortando carreteras del Estado, mientras los que de verdad levantan este país, los que de verdad pagan impuestos y crean empleo, los autónomos y trabajadores del transporte, no pueden hacer su trabajo».

Rivera ha aseverado que «un problema principal es la seguridad y la libertad», en alusión a «la seguridad de poder circular por nuestras carreteras sin que nadie queme con barricadas o corte las autopistas», reivindicando así «la libertad de poder circular, de trabajar, de llevar el pan a tu casa, de cumplir tus horarios y tus entregas».

Este es «el momento de estar al lado de los débiles, de los que no llegan a fin de mes, de los que pagan autónomos, de los que ven cómo les quitan el sueño cuando les cortan una carretera o no pueden hacer su trabajo».

«PARALIZAR EL DIESELAZO»

Por otra parte, Albert Rivera se ha comprometido a «paralizar» el immpuesto al diésel, denominado «dieselazo», por ser «un sablazo a 17 millones de conductores que, según el PSOE, son ricos».

Ha comentado que las empresas del sector sitúan el gasto en el diésel entre el 30 y el 40 por ciento de sus costes, de forma que «si incrementamos deliberadamente, radicalmente, inmediatamente, el coste del diésel, estamos perjudicando la cuenta de resultados y el bolsillo de todos esos miles de transportistas».

Rivera ha rechazado «los anuncios incendiarios» que solo han generado «la caída de ventas en lugares como Aragón, donde hay una plataforma importante para este país». Al tiempo, ha apostado por realizar «una transición energética, que no es lo mismo que una imposición energética», proponiendo que se pacte con el sector del transporte.