Albares y Alegría dicen que el español «goza de buena salud» aunque se enfrenta a «desafíos» para mantener su posición
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, y la ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, han reivindicado el español como lengua «de futuro» asegurando que «goza de muy buena salud» aunque debe hacer frente a «importantes desafíos» para mantener esta posición en el mundo.
«El español goza de muy buena salud. Esa es la realidad. En el estudio y en su aprendizaje, y se vigoriza con el fomento de la enseñanza, con la preparación de profesores que lo imparten y con manuales adaptados a los diversos contextos geográficos», ha manifestado Albares durante su intervención este jueves en el acto de presentación de la décima edición del informe El mundo estudia español , que ha tenido lugar en el Palacio del Marqués de Salamanca.
En palabras del ministro de Exteriores, la diplomacia educativa constituye un «pilar fundamental» y «sin duda el más consolidado, el que dura más tiempo», y ha calificado esta décima edición del estudio como la más «emblemática», lanzando algunos datos que recoge el estudio. «Somos casi el 8 por ciento de la población mundial los que hablamos o estudiamos el español», ha concretado.
En este contexto, Albares ha reivindicado la necesidad de formación de un gran cuerpo docente, fomentar más los diplomas del español como lengua extranjera y profesores extranjeros expertos en la enseñanza del español para «garantizar que sigue expandiéndose en lugares que hace unas décadas eran insospechados pero que hoy demandan el español como África Subsahariana, el Sudeste asiático o el Caribe anglófono», ha citado.
Así, ha deslizado que el Ministerio tiene el objetivo de incluir el español en la «educación reglada de terceros estados» y de fomentar que más estudiantes internacionales vengan a España a estudiar el idioma.
En términos parecidos se ha expresado la ministra de Educación, que ha comenzado su intervención agradeciendo a los auxiliares de conversación y a los profesores que enseñan español fuera de nuestras fronteras.
Al hilo, ha indicado que la acción educativa española en el exterior es una «de las palancas más importantes para seguir cimentando el español en el mundo» además de para mejorar el conocimiento de la cultura española en el resto de países.
«El estudio del español en esta década ha sido una historia de éxito, y que se vaya amplificando», ha finalizado.
En concreto, en el curso 2021-2022 un total de 86.538 estudiantes de todo el mundo estudiaban lengua y cultura españolas en el extranjero a través de los centros y programas del Ministerio, a lo que habría que sumar otros 47.500 alumnos del programa bilingüe ISA, impartido en Estados Unidos, Canadá y Australia.