Aguilera (Podemos) avisa de que Moreno y Marín están dispuestos «a todo» con Vox para «mantenerse en el poder»
SEVILLA, 4
La presidenta del grupo parlamentario de Adelante Andalucía y dirigente de Podemos, Ángela Aguilera, ha advertido de que tanto el presiente de la Junta, Juanma Moreno (PP-A), como el número dos, el vicepresidente, Juan Marín (Cs), están dispuestos «a todo» con Vox con tal de «mantenerse en el poder» y agotar la legislatura como «ya lo han demostrado».
En una entrevista con Europa Press, Aguilera ha acusado a los socios de gobierno de «blanquear» el discurso «xenófobo, machista y racista de la extrema derecha», toda vez que, a su juicio, en virtud de los acuerdos que están cerrando en Andalucía con los de Santiago Abascal –de investidura y presupuestario–, «se dan pasos hacia atrás».
«Están dispuestos a todo», ha insistido la dirigente de la confluencia andaluza, que apunta que «cuando el portavoz parlamentario de Vox en Andalucía, Alejandro Hernández, dice que el Presupuesto del 2019 es de transición cuando ya tienen pactadas las cuentas del 2020, es por algo».
Además, ha criticado que, para contentar a Vox, la consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, «niega la razón de su existencia diciendo que la brecha salarial hay que evidenciarla científicamente»; o que el Ejecutivo «diga que se va a eliminar el concepto violencia de género en la legislación contra la violencia machista», o también que «desaparezcan» los fondos para la acogida de menores inmigrantes porque así «se dan pasos hacia atrás y se blanquea el discurso xenófobo, machista y racista de la extrema derecha».
Aguilera cree donde no hay ninguna fisura entre el PP-A, Cs y Vox es en la política económica, pues estas tres fuerzas están de acuerdo en «bajar impuestos a los más ricos» o en que no se apuesta por la transición ecológica y por cambiar el modelo productivo «que permita a sacar a Andalucía del furgón de cola de la Unión Europea en el que se encuentra».
Del mismo modo, la presidenta del grupo de Adelante ha avisado de que, «por desgracia, Andalucía hoy es menos Andalucía que nunca como consecuencia del tripartito de derechas porque quien manda es Madrid» y esto conlleva que, como ha agregado, «se seguirá determinando el papel subalterno de Andalucía, el que ha tenido siempre».
Por contra, ha defendido que «es el momento de romper definitivamente con ese sino de esta comunidad» porque Andalucía «no puede seguir siendo una región pobre con el potencial que tiene».
«EN ANDALUCÍA MANDA VOX»
Con todo, y haciendo balance de los primeros meses de Gobierno, Aguilera ha criticado que el Gobierno del cambio «no es tal» pues es un Ejecutivo «de continuidad» que «profundiza en las políticas neoliberales que en su momento emprendió el anterior Gobierno de Susana Díaz».
«Este es el Gobierno de la degeneración, que no de la regeneración democrática, y en el que manda y pulsa la política andaluza la extrema derecha», ha proseguido antes de manifestar que se caracteriza por ser un Ejecutivo «de privatizaciones, de pérdida de derechos sociales, que gobierna contra las mujeres y contra la inmigración».
Frente a eso, censura que el Ejecutivo del PP-A y Cs «olvida las políticas activas de empleo destinando menos fondos, a las mujeres asumiendo el discurso de la extrema derecha, o a los que menos tienen con 68 millones menos en la Renta Mínima de Inserción».
Aguilera denuncia así que «la derecha viene a gobernar para unos pocos y deja en la estacada a la importante mayoría social, pone en peligro a los servicios públicos» o se caracteriza por hacer una gestión marcada por las «ocurrencias», como cree que sucede en la Consejería de Educación y Deportes de Javier Imbroda, o en la de Salud y Familias, de Jesús Aguirre, quien «pone al zorro a cuidar a las gallinas» al situar en el Servicio Andaluz de Salud a dirigentes «que no creen en la sanidad pública».
También se ha referido a las dimisiones de altos cargos que se han producido en estos seis meses en el Gobierno andaluz, la mayoría en el seno de consejerías de la cuota de Cs, para advertir de que «hay una crisis interna brutal que intentan disimular pero que es indisimulable».