Advierten de que el descenso de casos de meningitis causado por la Covid es temporal y de que subirán tras la pandemia
El jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela, el doctor Federico Martinón, también experto en enfermedad meningocócica, ha afirmado que las medidas de prevención de la Covid-19 han impactado también sobre la meningitis, produciéndose un descenso de los casos, pero avisa de que esta la enfermedad «no ha desaparecido», por lo que la incidencia volverá a subir una vez que desaparezcan dichas medidas.
«Actualmente, podríamos tener una décima parte de los casos de meningitis que estábamos viendo a estas alturas en la temporada anterior», ha estimado el experto en la antesala del día mundial de la enfermedad, que se conmemora este sábado, durante una rueda de prensa organizada por Pfizer. «A medida que recuperemos la normalidad, volveremos a la situación previa, y no podemos perder la perspectiva de una patología que, además de ser letal en algunos casos, tiene unas secuelas importantes para las personas que sobreviven a ella», ha reiterado.
En este sentido, ha recordado que el 10 por ciento de las personas que contraen la infección fallecen, y el 20 por ciento tienen secuelas graves, como déficits neurológicos permanentes y amputaciones, entre otras. «Si tenemos en consideración todo el impacto de la enfermedad y todo tipo de secuelas a medio y largo plazo, ese porcentaje es todavía mayor», ha señalado. Además, ha detallado que, más allá de las meningitis bacterianas, causadas por patógenos como el meningococo o neumococo, «también hay que tener en cuenta las víricas, no tan letales, pero con un número significativo de casos».
Asimismo, el experto ha querido poner de relieve la estabilización en las cifras de mortalidad y de morbilidad de estos últimos años. «Hemos llegado a un techo y desde hace unos años no somos capaces de mejorar estos números, ya que, independientemente del total de casos, si hay 10 pacientes muere uno, y al menos 2 tendrán secuelas graves», ha advertido.
Es por ello que el doctor Martinón ha destacado la importancia de las vacunas para prevenir estas infecciones. «Disponer de vacunas nos obliga a pensar no solo en positivo sobre las posibilidades que tenemos, sino a darnos cuenta de que solo funcionan si se utilizan, por lo que deben llegar al mayor número de personas y al mayor número de sitios posibles», ha apostillado, recordando que en algunas comunidades se ha producido un descenso del 50 por ciento en las vacunas fuera de calendario recomendadas por los pediatras.
Así las cosas, ha alertado de que «cualquiera es susceptible de contagiarse de meningitis». No obstante, ha puntualizado, «hay momentos de la vida donde somos más vulnerables, como es el caso de los lactantes, los niños menores de 5 años y la adolescencia», ha detallado. «Que no veamos las enfermedades no significa que podamos relajarnos en las medidas de prevención, como la vacunación», ha remachado, añadiendo que «en niños son mucho peores las enfermedades de calendario que la Covid-19».
Por último, el doctor ha querido destacar el reto marcado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) al respecto, «ambicioso pero factible», de derrotar la meningitis para el año 2030, «con la idea de controlar cualquier posible epidemia, reduciendo los casos y las muertes por cualquier meningitis prevenible por vacunación, y mejorando la calidad de vida de los que han sobrevivido».
Por otro lado, en la reunión también ha estado presente la presidenta de la Asociación Española contra la Meningitis (AEM), la doctora Cristina Regojo, quien ha insistido en la importancia de la sensibilización de la sociedad acerca de la enfermedad y su prevención. «No hay riesgo cero, cualquier persona puede coger una enfermedad meningocócica, sobre todo las personas de entre 15 y 24 años y los niños menores de 5», ha reiterado.
Asimismo, más allá de las secuelas comentadas por el doctor Martinón, Regojo ha informado de que hasta un 60 por ciento de los afectados tienen consecuencias psicológicas «de por vida». «La meningitis no acaba con el alta hospitalaria, hay vida después y los afectados tienen graves secuelas que necesitan el apoyo de las administraciones», ha reclamado.