Adjudicadas las obras de mejora del exterior de la Estación de Autobuses de Santander que la harán más eficiente
La Consejería de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio de Cantabria ha adjudicado las obras de mejora del exterior de la Estación de Autobuses de Santander que se destinarán a renovar las carpinterías y cristalerías que harán más eficiente el edificio.
El importe de adjudicación asciende a 253.427 euros y el plazo de ejecución de las obras está previsto en tres meses, ha informado hoy el Gobierno.
El consejero de Industria, Javier López Marcano, ha explicado que estas obras, además de mejorar la imagen del edificio, tienen un carácter eficiente «muy importante», ya que, debido al diseño, a la superficie acristalada de los cerramientos y a la antigüedad, la eficiencia energética de las dependencias situadas en las plantas sobre el edificio era «deficiente, de tal manera que las obras van a mejorarlo sustancialmente».
Marcano ha añadido que además existen múltiples puntos de filtración de agua y condensación en diferentes paños de cristal que pueden provocar incidentes en forma de cortocircuitos en las tomas de corriente situados en los zócalos bajo las cristaleras, riesgo que se evitará con las obras previstas.
Las obras consistirán fundamentalmente en la sustitución del muro cortina existente por un nuevo muro con una estructura más sólida y moderna, además de la sustitución de la puerta de acceso de la fachada oeste por otra automática corredera simple, de apertura central, de 2,45 metros de altura libre, ancho de hueco de 2,50 metros y 1,20 metros de paso libre, y de una persiana enrollable de aluminio anodizado que servirá para mejorar su seguridad.
Esta actuación se enmarca en la modernización de la Estación de Autobuses de Santander, que comenzó hace varios meses con la remodelación del vestíbulo y de la plaza situada en la cubierta del edificio, que supusieron una inversión de más de 900.000 euros.
Las obras exteriores acometidas en su día, además de la creación de un parque de juegos infantiles, consistieron en la construcción de una rampa contra las barreras arquitectónicas, la modernización de pavimentos, la limpieza de la marquesina que protege a los viajeros en la dársena de cercanías, la ampliación de la superficie de la plaza y la renovación de su cerramiento.
También se acometió la impermeabilización de la superficie de la plaza, que funciona a su vez de techo de la planta comercial, solucionando un problema de filtraciones de agua.
Las obras de remodelación y reforma del vestíbulo dotaron de luz natural a todo el espacio mediante la apertura de grandes ventanales en la fachada sur y sustituyendo los vidrios tintados actuales. También se abordó la mejora de la eficiencia energética del edificio, su uso más funcional y la creación de una zona exclusiva de información sobre horarios, taquillas manuales y taquillas automáticas, entre otras actuaciones.
El proceso de modernización de la estación continuará con la reforma de las plantas comercial y de dársenas, para lo cual se prevé la redacción de sendos proyectos constructivos.
La estación de autobuses santanderina, que data de 1986, proporciona aproximadamente servicio a seis millones de usuarios al año y no se habían realizado actuaciones de entidad para adaptar sus instalaciones a las nuevas necesidades del transporte.