Acciona entra en una desaladora de 1.724 millones de euros en Australia
Un consorcio integrado por Acciona ha sido seleccionado como proponente preferente por Water Corporation, la mayor empresa de agua en Australia Occidental, para llevar a cabo el diseño, la construcción, la operación y el mantenimiento durante diez años de la desaladora de Alkimos, en Perth.
En su primera etapa, está previsto que el proyecto de diseño y construcción suministre agua potable en 2028 como parte de un programa global de obras de Water Corporation valorado en 2.800 millones de dólares australianos (1.724 millones de euros) para garantizar el suministro de agua potable.
En esa primera etapa, la planta tendrá una capacidad inicial de 150.000 metros cúbicos diarios, a los que se sumarán otros 150.000 metros cúbicos al día en una segunda fase, según ha informado la compañía en un comunicado.
El proyecto, que pretende ayudar a la región a afrontar la disminución de las precipitaciones y el crecimiento de la población de la zona, lo llevará a cabo una alianza compuesta por Water Corporation, Acciona y Jacobs, integrando la sostenibilidad en el diseño, la entrega y las operaciones de la planta.
Desde 1970, las precipitaciones invernales en el suroeste de Australia Occidental se han reducido un 20%, mientras que la población de Perth –actualmente de 2,12 millones de habitantes– alcanzará los 2,9 millones en 2031 y los 3,5 millones en 2050, lo que la convertirá en la tercera ciudad más grande de Australia y aumentará considerablemente la demanda de agua potable.
Acciona se estableció en Australia en 2002 y ha ejecutado proyectos relevantes en el sector del agua, como la desaladora de Adelaida o la planta de tratamiento de agua de Mundaring, así como otras infraestructuras como los túneles ferroviarios de Melbourne o una línea de transmisión eléctrica en Nueva Gales del Sur.
También el túnel Western Harbour de Sídney, la construcción de la pista del nuevo Aeropuerto Internacional de Sídney Occidental, el tramo central del Metro West de Sídney, el nuevo ferrocarril subterráneo que recorre gran parte de la mayor ciudad del país; y la supresión de los pasos a nivel de la línea ferroviaria de Frankston, en Melbourne.
