Asesinados un policía y un guía turístico en Colombia
El inspector de Policía y líder comunitario del corregimiento colombiano de Arusí, José Riascos, y un guía comunitario han sido asesinados este viernes por individuos armados en ataques consecutivos que podrían ser en represalia por las últimas operaciones antidroga en la región.
El inspector fue asesinado en un zona ubicada a 40 minutos en lancha del casco urbano de la localidad de Nuquí, departamento de Chocó, y minutos en ese mismo corregimiento fue asesinado el guía turístico Margarito Salas, aparentemente por los mismos atacantes, informa la emisora colombiana RCN.
Margarito logró llegar con vida al casco urbano de Nuquí. Sin embargo, falleció cuando esperaban la ambulancia para ser trasladado a Medellín.
El alcalde de Nuquí, Yefer Arley Gamboa Palacios, ha lamentado estas muertes y ha asegurado que eran dos personas muy queridas en la comunidad. «Fueron prácticamente simultáneos. Primero uno y luego el otro. Son casos similares que se presume que fueron las mismas personas las que cometieron el asesinato. Los móviles son similares. Es un pueblo muy pequeño y no hay forma de que sean hechos aislados», ha apuntado.
Una de las hipótesis que manejan las autoridades es que los asesinatos serían una represalia de grupos ilegales tras las recientes incautaciones de droga en la región.
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) ha condenado estos homicidios. «El líder José Riascos y el guía comunitario Margarito Salas de Arusí, fueron asesinados en Nuquí, Chocó. Presencia Integral del Estado y evaluación de estrategias de seguridad», ha planteado la organización.
«Margarito Salas era reconocido por desempeñarse como guía comunitario de La Batea, entendiendo su labor como la de quien fortalece el liderazgo social desde los procesos comunitarios. También realizaba labores de investigación en apoyo a las parcelas de monitoreo de biodiversidad», ha subrayado Indepaz.
Según datos de Indepaz, a lo largo de 2020 fueron asesinados 309 líderes sociales y defensores de los Derechos Humanos en Colombia y en 2021 se han contabilizado al menos 26 masacres con al menos 95 víctimas mortales.