Expertos en Reumatología advierten sobre la discordancia entre médico y paciente en la valoración de la enfermedad
Expertos en Reumatología, reunidos en el curso Midiendo en Reumatología , que ha celebrado la Sociedad Española de Reumatología, con la colaboración de Lilly, han avisado sobre la discordancia entre médico y paciente en la valoración de la enfermedad.
«No podemos simplemente ignorar lo que es importante para el paciente, y en esto los PROs pueden ser un gran aliado porque nos permiten mejorar la comunicación con el paciente y que este entienda qué medidas pueden tener más impacto en su salud o en su calidad de vida. Aparte de que el mero hecho de preguntarle a alguien por sus síntomas o problemas hace que lo ponga en el contexto de la enfermedad, que aprenda de la enfermedad y que confíe en el médico que se preocupa por su salud y bienestar», ha dicho la reumatóloga en el Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid y co-coordinadora del curso, Isabel Castrejón.
Asimismo, la metodóloga en el Instituto de Salud Musculoesquelética de Madrid, Loreto Carmona, ha insistido en que, por ejemplo, medir permite comparar el antes y después de un tratamiento. Además, señala, los PROs permiten incorporar la perspectiva del paciente, siendo herramientas básicas para hacer una medicina eficiente y centrada en él.
No obstante, Carmona ha destacado la importancia de familiarizarse con las opciones de las que disponemos para medir y una vez tomada la decisión de con qué medir todo va mucho más rápido, y ha hecho hincapié en que con los PROs, el paciente puede ver su evolución, el médico puede confirmar si el tratamiento funciona y se puede dedicar tiempo a otras cosas importantes para los dos.
Precisamente, la falta de tiempo es algo a lo que apelan los profesionales como principal barrera para utilizar estas herramientas en su día a día. Sin embargo, para Castrejón, algo que podría haber enseñado la situación producida por la pandemia de COVID-19, que ha impulsado la teleconsulta, es precisamente, que sólo hace falta voluntad política y de gestión para incorporarlas a la actividad clínica y a las historia clínica electrónica de los hospitales y centros sanitarios.
«El tiempo necesario para rellenar los cuestionarios de medición es del paciente, no del médico, y no es tiempo perdido, sino ganado en que el paciente se centre en lo más relevante», ha enfatizado la especialista en Reumatología.