La argentina Pampa Energía pierde 307 millones en 2020, frente a las ganancias del año anterior
Pampa Energía, la empresa energética privada más grande de Argentina, registró unas pérdidas netas atribuidas de 367 millones de dólares (307,8 millones de euros) en el ejercicio del 2020, frente al beneficio de 692 millones de dólares (580,4 millones de euros) contabilizado en el año anterior.
La empresa explicó esta evolución negativa por el deterioro de activos en los negocios de distribución y generación de energía y actividades petroquímicas, además de un impacto fiscal de 35 millones de dólares (29,3 millones de euros) sobre las ganancias.
La cifra de negocio de la compañía se situó en los 1.071 millones de dólares (898,6 millones de euros), un 20% menos; con unos costes asociados de 664 millones de dólares (557,1 millones de euros), un 18,2% menos. De este modo, el resultado bruto del grupo alcanzó los 408 millones de dólares (342,4 millones de euros), un 22,5% menos.
La caída en los ingresos se explica por las menores ventas de gas para generación eléctrica propia, la bajada en los precios y volúmenes vendidos de hibrocarburos y productos petroquímicos. Todo ello fue compensado parcialmente por la entrada de nuevas unidades de generación eléctrica bajo contratos de abastecimiento mayorista de electricidad (PPA, por sus siglas en inglés).
De su lado, el resultado bruto de explotación (Ebitda) fue de 750 millones de dólares (630 millones de euros), un 18% menos que el año anterior; mientras que el resultado operativo se ubicó en los 243 millones de dólares (203,8 millones de euros), un 47,4% menos.
En el cuarto trimestre, las ventas de Pampa Energía cayeron un 10,3%, hasta los 285 millones de dólares (239 millones de euros); mientras que el resultado neto atribuido entró en números rojos con 463 millones de dólares (388,4 millones de euros), en contraste con las ganancias de 9 millones de dólares (7,5 millones de euros) registrados el año anterior.