La fiscal mantiene los 4 años para el acusado del fuego de Ramales, que «pasó de cero a cien en segundos»
Las partes elevan a definitivas sus conclusiones y los peritos destacan que se originó en un lugar «idóneo» para su propagación
Las partes personadas en el juicio por el fuego que en febrero de 2019 arrasó la Sierra de la Alcomba, en Ramales de la Victoria, han elevado este jueves a definitivas sus conclusiones, de modo que la fiscal mantiene la petición de cuatro años de cárcel para el acusado, el exjefe de la agrupación de voluntarios de Protección Civil del municipio, al que imputa un delito de incendio forestal.
En la sesión de hoy, penúltima para la conclusión del juicio -pendiente únicamente de los informes de acusaciones y defensa-, se ha practicado también la prueba pericial, con la declaración de agentes encargados de la investigación y evaluación de daños, entre ellos un ingeniero de montes que ha destacado que el fuego «pasó de cero a cien en segundos» y «se pudo detectar desde el momento inicial».
Por eso cree que se empleó algún tipo de acelerante para favorecer su rápida propagación y, en cualquier caso, este agente forestal -que se encargó del esclarecimiento de las causas- está seguro de que fue provocado. En este sentido, ha explicado que se originó en un lugar «idóneo» para su desarrollo: en una ladera con pendiente, expuesta al viento sur que soplaba esa noche -del 17 al 18 de febrero-, con vegetación y terreno seco, por la ausencia de lluvias y altas temperaturas.
Asimismo, ha remarcado que se inició en siete puntos distintos en una distancia de 65 metros a lo largo de una cuneta de una pista forestal asfaltada que comunica de Ramales con la Alcomba, donde se arrasaron 144,30 hectáreas, en las que había pasto, matorral, eucaliptos -con fines comerciales- y árboles autóctonos, como encinas o robles.
Todo ello en una jornada en la que, como ha recordado este perito, Cantabria estaba en nivel dos de alerta por incendios -lo que requiere la presencia de medios externos para sofocarlos-, debido a un episodio de viento sur que se saldó con 231 focos desde comienzos de mes hasta la fecha, que arrasaron un total superior a las 3.000 hectáreas, y de los que el 99,9 por ciento -según ha cifrado- fueron «intencionados».
(Habrá ampliación)