Etiopía tilda de «infundadas» las denuncias de tres partidos de Tigray sobre la muerte de más de 50.000 civiles

El Gobierno de Etiopía ha rechazado este miércoles las denuncias de tres partidos opositores de la región de Tigray (norte) sobre la muerte de cerca de 50.000 civiles durante la ofensiva militar contra el Frente para la Liberación Popular de Tigray (TPLF).

«Las informaciones sobre víctimas civiles que están circulando en medios internacionales son infundadas y sufren de desafortunados motivos políticos», ha manifestado a través de su cuenta en la red social Twitter la unidad de verificación del Ejecutivo.

Así, ha dicho que Adís Abeba «lamenta cualquier víctima civil durante las operaciones de seguridad» y ha dicho que «incluso la muerte de un civil inocente es ya demasiado». «El hecho de que no nos hayamos encontrado con un número significativo de víctimas civiles es prueba de la planificación y profesionalidad del Ejército», ha agregado.

La reacción del Gobierno etíope llega después de que el Partido de la Independencia de Tigray (TIP), el Salsay Weyane Tigray (SAWET) y el Congreso Nacional del Gran Tigray (BAYTONA) denunciaran la muerte de más de 52.000 civiles durante la ofensiva.

Así, estas formaciones señalaron que «niños, mujeres, jóvenes, ancianos y padres religiosos» fueron «sacrificados indiscriminadamente» en un conflicto que inició el Ejecutivo etíope «no electo» para «negar el derecho constitucional de las personas al autogobierno y la autodeterminación».

En este sentido, apuntaron que, por estos hechos, más de tres millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares y se han convertido en desplazados internas en Tigray, mientras que alrededor de 150.000 se han trasladado a otras partes de Etiopía. «Además, decenas de miles han huido a Sudán para escapar de las atrocidades en su tierra natal», puntualizaron.

Según los datos ofrecidos por los tres partidos opositores, más de 6,5 millones de personas, incluidos los desplazados internos, necesitan ayuda humanitaria «urgente». En este contexto, aludieron al «hambre» y señalaron que el Gobierno etíope la está utilizando «como arma para someter a Tigray, ya que ha estado obstruyendo los esfuerzos internacionales de asistencia humanitaria».

LA SITUACIÓN EN TIGRAY

El inicio de la ofensiva fue anunciado el 4 de noviembre por el primer ministro, Abiy Ahmed, en respuesta a un ataque por parte del TPLF contra una importante base del Ejército en Mekelle que se saldó con numerosas víctimas entre los militares.

La escalada bélica ha sido la culminación de un pulso que comenzó con la llegada al poder de Abiy Ahmed como primer oromo jefe de Gobierno. El TPLF fue el partido fuerte dentro de la coalición que gobernó Etiopía desde 1991, el Frente Democrático Revolucionario del Pueblo Etíope (EPRDF), sustentada en las etnias.

Apartado del poder, el TPLF ha visto en las reformas acometidas por Abiy, en particular las relativas a abusos de Derechos Humanos y de reconciliación con grupos armados entre otros, como una caza de brujas contra sus dirigentes, los cuales se vieron en muchos casos apartados de los cargos que ocupaban.

La ruptura definitiva la marcó la creación del Partido de la Prosperidad a finales de 2019 por parte de Abiy para dejar atrás al EPRDF. Todos los partidos que integraban la alianza gobernante, y algunos más en su órbita, se sumaron a la nueva formación, con la excepción del TPLF, lo que también dejó al partido al margen de la toma de decisiones en el Gobierno federal.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

La Junta Electoral se plantea buscar voluntarios para constituir las mesas electorales en Cataluña
Renfe adjudica a Alstom el mantenimiento de 24 trenes AVE por 118,5 millones de euros

Bloqueador de anuncios detectado

Por favor, considere ayudarnos desactivando su bloqueador de anuncios