La Casa Blanca no contestará a la congresista acusada de amenazas para evitar la difusión de «conspiraciones»
La Casa Blanca ha decidido que no dará contestación al caso de la congresista republicana Marjorie Taylor Greene, acusada de publicar varios mensajes en sus redes sociales asociados al movimiento conspiratorio QAnon y de verter amenazas contra compañeras demócratas para evitar la difusión de «teorías de la conspiración», según ha manifestado este viernes la secretaria de Prensa, Jen Psaki.
En los últimos días, la controvertida Greene ha vuelto a ser noticia después de que se descubriera el apoyo que había mostrado a algunos mensajes en redes sociales en los que se pedía atacar a representantes del Partido Demócrata, como las congresistas Alexandria Ocasio Cortez o Rashida Tlaib, así como un vídeo en el que acosaba al superviviente de un tiroteo en una escuela de Florida en 2018 cuando acudió semanas después al Capitolio para exigir un mayor control de las armas de fuego.
El joven David Hogg fue perseguido y cuestionado por Greene, quien por entonces no ocupaba cargo público alguno, llamándole cobarde y acusándole de estar siendo financiado por el empresario George Soros, objetivo recurrente de los seguidores de las teorías conspirativas. Greene ha borrado varios de estos mensajes en los últimos días.
«No quiero dar todavía más pábulo a teorías conspiratorias en la sala de prensa de la Casa Blanca, así que mejor lo dejamos aquí», ha respondido Psaki, quien ha preferido dejar «en manos del Congreso» cualquier tipo de amonestación o reprobación contra la congresista.
Quien sí se mostró contundentemente en contra de la congresista fue la líder demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien reprochó además su asignación a la comisión educativa de la cámara baja del Congreso.
«No sé en qué estaban pensando los republicanos. Han asignado a una mujer que se burló del asesinato de niños pequeños en la escuela primaria Sandy Hook y que se burló del asesinato de adolescentes en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas. Me parece absolutamente espantoso», lamentó Pelosi.