Rusia protesta ante EEUU por el «apoyo» de su Embajada a las protestas convocadas por el opositor Alexei Navalni
El Gobierno de Rusia ha protestado oficialmente este lunes ante Estados Unidos por el «apoyo» de su Embajada en Moscú a las protestas convocadas durante el fin de semana por el opositor Alexei Navalni, consideradas ilegales por las autoridades del país euroasiático.
El viceministro de Exteriores ruso, Sergei Riabkov, ha trasladado una queja al embajador estadounidense, John Sullivan, por el papel de la legación diplomática estadounidense durante las protestas, según ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik.
Así, Riabkov ha protestado porque la Embajada «difundió en redes sociales y sitios web informaciones en apoyo a las protestas ilegales» en varias ciudades del país, tal y como ha detallado la portavoz del Ministerio, Maria Zajarova, en declaraciones a la cadena de televisión 1TV.
Asimismo, Zajarova ha desvelado que las autoridades investigarán la actuación de varias redes sociales en Estados Unidos durante las protestas debido a una «actividad muy intensa». «Se trata de las plataformas de redes sociales y de vídeos que tanto estos días como en días anteriores divulgaron una gran cantidad de información falsa», ha zanjado.
Las fuerzas de seguridad detuvieron el sábado a más de 3.700 manifestantes, mil de ellos en Moscú, en el marco de las concentraciones para denunciar la detención de Navalni, arrestado una semana antes a su regreso de Berlín, donde pasó cinco meses convaleciente tras sufrir un envenenamiento.
El organismo pro Derechos Humanos OVD-Info ha cifrado en 3.711 los detenidos en Rusia, entre ellos cerca de 1.500 en Moscú y 557 en San Petersburgo. Fuentes policiales citadas por Sputnik han cifrado en trece los agentes heridos durante los incidentes.
Navalni se desplomó en un vuelo interno el pasado 20 de agosto y fue posteriormente trasladado en avión a Berlín para recibir tratamiento. La Unión Europea impuso en octubre sanciones contra varios altos funcionarios próximos al presidente ruso después de que laboratorios de Alemania, Francia y Suecia determinaran que Navalni había sido envenenado con un agente químico nervioso desarrollado por los soviéticos conocido como Novichok.
El destacado opositor ruso denunció que el Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia, la principal agencia sucesora de la KGB soviética, fue directamente responsable de su intento de asesinato, una versión que ha sido rechazada en todo momento desde Moscú.