La secretaria de Educación de EEUU dimite señalando «el impacto» que la retórica de Trump tuvo en el asalto
La secretaria de Educación de Estados Unidos, Betsy DeVos, ha presentado su dimisión este jueves tras reconocer que para ella ha supuesto «un punto de inflexión» el asalto al Capitolio, pues, «no hay duda del impacto» que «la retórica» del presidente, Donald Trump, tuvo en aquellas personas que participaron.
«Deberíamos destacar y celebrar los muchos logros de su Administración en nombre del pueblo estadounidense. En cambio, nos quedamos para limpiar el desastre causado por los manifestantes violentos que invadieron el Capitolio de los Estados Unidos», ha expresado DeVos.
A través de una misiva a la que ha tenido acceso el diario The New York Times , Devos ha señalado que «no hay duda del impacto que tuvo la retórica» del presidente Trump «en la situación», la cual ha supuesto para ella «un punto de inflexión».
«Ese comportamiento fue inconcebible para nuestro país», ha enfatizado DeVos, una de las primeras personas del equipo de Gobierno de Donald Trump en apresurarse a condenar los hechos ocurridos este domingo.
«La transferencia pacífica del poder es lo que separa a la democracia representativa estadounidense de las repúblicas bananeras», expresó DeVos, en el cargo desde febrero de 2017, a través de una publicación en su cuenta de Twitter horas después del ataque al Capitolio.
DeVos es la segunda persona dentro de la Administración de Donald Trump en presentar su dimisión tras lo ocurrido en Washington, después de que lo hiciera este jueves, horas antes, la secretaria de Transporte, Elaine Chao.
En las últimas horas, el presidente Trump ha comparecido en una grabación difundida a través de sus redes sociales para condenar la violencia mostrada un día antes por la caterva de exaltados, asegurando que «profanaron la sede de la democracia estadounidense» y que por ello, «pagarán».
A su vez, Trump, quien ha pedido ahora que se «enfríen los ánimos» y se «restablezca la calma», ha apelado a la unión de los estadounidenses para «derrotar» la crisis del coronavirus, que «ha trastornado» la vida del país, dañado «la mayor economía del mundo» y «se ha cobrado innumerables vidas».
Por último, ha prometido una transición de poder «sin problemas», reconociendo además, por primera vez de manera pública, que será Joe Biden quien asuma el cargo de presidente el 20 de enero, aunque justificando sus intentos de impugnar los resultados afirmando que «sólo luchaba por defender la democracia estadounidense».