El Congreso llama a declarar al ministro de Gobernación sobre la actuación policial durante las protestas
El Congreso de Guatemala ha llamado a declarar este miércoles al ministro de Gobernación, Gendri Reyes, por la actuación policial durante las protestas registradas contra los presupuestos para 2021 del Gobierno del presidente, Alejandro Giammattei.
La citación ha sido emitida por unos 40 diputados de diferentes grupos parlamentarios y, junto a Reyes también ha sido convocado el director de la Policía Nacional guatemalteca, José Tzubán. Ambos tendrán que responder a las preguntas sobre el presunto uso de la fuerza por parte de los agentes en el marco de unos fuertes disturbios.
Tzubán ha señalado que en ningún momento se dio «instrucción alguna» para «reprimir» a los manifestantes, según informaciones del diario Prensa Libre , si bien Reyes ha insistido en que toda instrucción incluía «actuar bajo la ley».
Sin embargo, imágenes difundidas por varios medios de comunicación y usuarios de las redes sociales muestran cómo los manifestantes fueron fuertemente sofocados por las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional, que lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar a la multitud en la Plaza de la Constitución.
En total, según datos de la Policía, 2.068 agentes fueron desplegados durante las protestas tras la aprobación por parte del Congreso de un presupuesto que incluye un endeudamiento récord en la historia del país.
A pesar del gran despliegue policial, los manifestantes lograron acceder al edificio del Congreso, donde provocaron un incendio. Algunos diputados han criticado la actuación policial y han lamentado que lo sucedido pueda tener «consecuencias a nivel internacional».
El Congreso, de mayoría afín al presidente, aprobó la semana pasada un presupuesto por 99.700 millones de quetzales (unos 10.800 millones de euros) con un aumento de cerca del 25 por ciento respecto al ejercicio anterior.
La mayoría de fondos están dirigidos a la construcción de infraestructuras en concesiones al sector privado y no prevé aumentar las partidas de salud ni de educación, ni tampoco las destinadas a combatir la pobreza y la desnutrición infantil.
El 59,3 por ciento de los casi 17 millones de habitantes de Guatemala vive en la pobreza y la desnutrición infantil afecta a casi el 50 por ciento de los niños menores de cinco años.
