El Gobierno inicia contactos con los partidos tras las tensiones por el peso de los militares en el Parlamento
El Gobierno de Malí ha iniciado contactos con los dirigentes de varios partidos políticos del país debido a las tensiones a raíz de la composición del Parlamento de transición, dominado por militares, y ante las denuncias de numerosos grupos sobre una militarización de las instituciones del país.
El encuentro ha tenido lugar después de que el presidente de transición, Bah Ndaw, defendiera su decreto sobre el reparto de escaños frente a las críticas vertidas por diversos partidos y agrupaciones sindicales, especialmente desde el Movimiento 5 de Junio-Agrupación de Fuerzas Patrióticas (M5-RFP).
En la reunión han participado los ministros de Administración Territorial, Reconciliación Nacional y Refundación del Estado –los dos primeros, militares–, quienes han defendido la decisión de Ndaw y han pedido «neutralidad» a los partidos y evitar tensiones durante la transición, al tiempo que han hecho hincapié en la importancia del papel de estas formaciones en Malí.
«Hemos hablado del asunto», ha dicho Kadiatou Coulibaly, miembro de la Unión por la República y la Democracia (URD) –el partido liderado por Soumalia Cissé, recientemente liberado tras meses en manos de la rama de Al Qaeda en Malí–, según ha informado la emisora Radio France Internationale.
Coulibaly ha asegurado que han trasladado a los ministros que la formación del Consejo Nacional de Transición (CNT) fue anunciada sin los contactos necesarios con los partidos, una crítica formulada por la mayoría de formaciones. «Nos han dicho que van a trasladar el mensaje a la Presidencia», ha señalado, si bien ha agregado que no espera cambios.
En este sentido, Djiguiba Keita, exministro y representante del Partido para el Renacimiento Nacional (PARENA), ha recalcado que los ministros «han visto el clamor que ha provocado» la decisión sobre el CNT.
«No respondieron al fondo, pero tengo la impresión de que eso podría cambiar», ha argüido, antes de recalcar que PARENA ha pedido que se suspenda la toma de posesión del CNT y que al frente del mismo no sea puesta una figura militar.
Por su parte, Youssouf Diawara, de Yelema, ha criticado igualmente «el proceso» de reparto de escaños en el Parlamento de transición. «Queremos ayudar, incluso si eso implica hacerlo al margen de las instituciones de transición», ha valorado.
EL DECRETO
El decreto publicado por Ndaw recoge que 22 de los 121 miembros del CNT serán «representantes de las fuerzas de defensa y seguridad», mientras que ocho serán integrantes del opositor M5-RFP. Asimismo, once serán miembros de los diversos partidos, mientras que nueve serán representantes de organizaciones de la sociedad civil.
A ellos se sumarán cuatro representantes de agrupaciones de mujeres y otros cuatro de organizaciones de jóvenes, junto a cinco representantes de los grupos firmantes del acuerdo de paz. Asimismo, habrá cuatro representantes de «movimientos de inclusividad», cuatro de organizaciones de defensa de los Derechos Humanos, tres de personas con discapacidad, seis de la diáspora, cuatro de centrales sindicales, siete de sindicados autónomos, ocho de grupos profesionales.
Por último, a ellos se sumarán tres representantes de confesiones religiosas, cinco de las autoridades tradicionales, cinco de los organismos consulares, cuatro de los órganos de prensa y cinco del mundo del arte y la cultura.
En respuesta, el comité estratégico del M5-RFP, que estuvo detrás de las masivas manifestaciones contra Ibrahim Boubacar Keita previas al golpe de Estado del 18 de agosto, denunció la semana pasada la composición del CNT y criticó la «militarización de las instituciones» y la «negligencia hacia los partidos y movimientos políticos».
El destacado movimiento opositor ya quedó al margen del Gobierno de unidad y negó haber participado en la aprobación de la hoja de ruta para el proceso de transición. A las críticas se sumaron la Confederación Sindical de Trabajadores de Malí (CSTM), la Coalición de Fuerzas Patrióticas (COFOP) y el partido Yelema del ex primer ministro Moussa Mara.
Ndaw fue nombrado para el cargo el 21 de septiembre por parte de la junta militar surgida de la asonada, cuyo nombre oficial era Consejo Nacional para la Salvación del Pueblo (CNSP), mientras que el líder de la misma, Assimi Goita, fue nombrado vicepresidente.
Posteriormente, Moctar Ouane fue nombrado primer ministro, tras lo que se desveló un Ejecutivo de transición con militares en las principales carteras, lo que ya provocó críticas por parte del M5-RFP, encabezado por el influyente imam Mahmoud Dicko.