Los grandes fondos internacionales aprovecharán las oportunidades que la crisis aflore en España
El capital privado dispone de mucha liquidez y estará «muy activo» en los próximos 12 meses
Los grandes fondos de capital privado internacionales están cargados de liquidez y prevén aprovechar las oportunidades de inversión en las empresas afectadas por la crisis del Covid-19 en España, uno de los países más perjudicados económicamente por la pandemia a nivel mundial.
Con la llegada del coronavirus y el confinamiento en el primer semestre, el capital privado se ha centrado en apoyar a las compañías participadas de sus carteras, toda vez que ha aumentado la liquidez levantando nuevos fondos que van a estar «muy activos» en los próximos doce a 18 meses, según explican a Europa Press en fuentes financieras.
En esta segunda ola del Covid-19, «entramos en una etapa más compleja de solvencia en la que las empresas no podrán resolver sus problemas con más deuda, sino con capital o venta de activos», detallan estas fuentes, que consideran que estos fondos «ahí van a jugar un papel importante».
Los fondos de capital privado disponen de 1,5 billones de dólares (cerca de 1,3 billones de euros) en dry powder o exceso de capital para invertir a nivel global, según las cifras a cierre del primer trimestre de Preqin. Según estos datos, los fondos con foco geográfico en España tendrían cerca de 50.000 millones para invertir a cierre del primer semestre.
En el caso de España, este capital busca oportunidades para invertir tras reducirse un 67% la inversión interanual de capital privado y capital riesgo en el primer semestre, con 1.434 millones de euros invertidos en 344 operaciones, según los datos facilitados por la patronal Ascri.
En el último año, los activos gestionados por el capital privado han crecido a una tasa compuesta anual del 10,6% hasta marzo, con lo que ya superan los 4,43 billones de dólares (3,8 billones de euros) a nivel global.
Los inversores de private equity han cambiado sus preferencias geográficas en estos doce meses, con un incremento del peso de los fondos centrados en Estados Unidos (del 45% al 56%) y Europa (del 39% al 53%), frente al mismo interés en Asia-Pacífico, que se mantiene en el 34%, y una reducción de los vehículos enfocados en las regiones emergentes (10%) y el resto del mundo (7%).
MÁS ACTIVIDAD EN EL TERCER TRIMESTRE
El capital privado ha movilizado 102.000 millones de dólares (86.900 millones de euros) en operaciones durante el tercer trimestre en todo el mundo, prácticamente en línea (-0,5%) con el mismo periodo del año anterior.
Esta movilización de recursos supone un repunte del 69% respecto al segundo trimestre de este año, tras la rápida adaptación de los gestores a las operaciones de private equity de forma remota y con más incertidumbre por el Covid-19.
En los últimos tres meses se han cerrado 237 fondos de capital privado, un 18% menos que el trimestre anterior, con gran mayoría de Estados Unidos (141). En Europa, los 33 fondos cerrados entre junio y septiembre, tuvieron un tamaño medio de 1.700 millones de dólares (1.450 millones de euros), lo que suma un volumen levantado de 57.000 millones de dólares (48.600 millones de euros).
PREFERENCIA POR LOS FONDOS DE COMPRA
Las preferencias de los grandes inversores son «más conservadoras» tras la irrupción de la pandemia, de forma que se favorecen los fondos de compra, los fondos de fondos y los secundarios, por delante de los fondos de crecimiento y el capital riesgo, según Preqin.
Además, hay preferencia por los vehículos más grandes: el tamaño medio de estos vehículos se ha incrementado hasta los 536 millones de dólares (457 millones de euros), un 26% más que el trimestre previo.
Por su parte, el volumen del venture capital creció un 34% en el tercer trimestre respecto al trimestre anterior, con un aumento del 39% interanual, hasta los 84.000 millones de dólares (71.600 millones de euros) a nivel global.
El capital riesgo registró 541 operaciones de salida el pasado trimestre, con un importe media de 219 millones de dólares (187 millones de euros) y solo se cancelaron seis acuerdos, según el registro de Preqin.