El INE contabiliza 227 muertes más de las esperadas en 2020 en Cantabria
En España son 57.817 muertes más de las esperadas, 23.607 más que las notificadas por COVID-19
SANTANDER/
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha estimado que en las 41 primeras semanas de 2020, hasta el 11 de octubre, han muerto en Cantabria 4.976 personas. Es decir, 227 más que en el mismo periodo de 2019, cuando se notificaron 4.749 fallecidos.
Estas cifras suponen un incremento del 4,79% en el número de fallecidos en Cantabria, el segundo más bajo de todas las comunidades tras el de Galicia (4,4%). De media, las muertes crecieron un 17,7% en España hasta el 11 de octubre, con la Comunidad de Madrid a la cabeza con un 44%.
En concreto, en dicho periodo han muerto en Cantabria 20 mujeres mayores de 90 años más que el año pasado pero 42 hombres menos. De 85 a 89, han fallecido 64 mujeres más y 42 hombres menos. De 80 a 84, se han producido 31 fallecimientos más de mujeres y 30 de hombres. Hasta 171 mujeres más han fallecido en 2020 dentro del grupo de 75 a 79 años, en comparación con 338 hombres.
DATOS NACIONALES
En España, el INE ha estimado que hasta el 11 de octubre han muerto 384.618 personas, 57.817 más que en el mismo periodo de 2019, que contrastan con los 34.210 fallecimientos notificados por el Ministerio de Sanidad por COVID-19, según las cifras oficiales.
Es decir, hay una variación de, al menos, 23.607 defunciones entre las estadísticas del INE y del departamento ministerial.
En concreto, han muerto 10.982 mujeres mayores de 90 años más que el año pasado y 5.711 hombres más. De 85 a 89, han fallecido 7.200 mujeres más y 5.593 hombres más. De 80 a 84, se han producido 3.591 fallecimientos más de mujeres y 3.994 de hombres. Hasta 3.010 mujeres más han fallecido en 2020 dentro del grupo de 75 a 79 años, en comparación con 5.497 hombres.
El INE está realizando una estimación del número de defunciones semanales durante la pandemia de COVID-19. Este proyecto se plantea el estudio de las defunciones semanales ocurridas durante 2020 y su comparación con los datos históricos de defunciones desde el año 2000, lo que permite interpretar los datos con perspectiva histórica, dada la variabilidad que presentan las defunciones a lo largo del tiempo.
El proyecto no tiene una duración determinada, depende de elementos ajenos como es la propia evolución de la pandemia, pero al menos se prevé que tenga una duración de un año. «No obstante, hay que considerar en todo momento su carácter experimental y tomar las cifras con cautela dado que se ofrecen datos estimados por un modelo que podría subestimar o sobreestimar resultados», puntualiza el organismo.