Los partidos del Gobierno valenciano rechazan un plan contra la ocupación porque lo primero es frenar los desahucios

VALENCIA, 29

Los partidos del Botànic (PSPV, Compromís y Unides Podem) han rechazado este martes la petición de Ciudadanos de crear un plan autonómico contra la ocupación ilegal de viviendas porque creen que la prioridad pasa ahora por aumentar el parque público y combatir los desahucios, la especulación de fondos buitre y el fraude fiscal.

«Tres ocupaciones diarias y 1.300 viviendas ocupadas ilegalmente en la Comunitat», ha denunciado la diputada naranja Mamen Peris ante el pleno de Les Corts, alertando de la situación de impunidad en la que «el ocupa se ríe del propietario». Esta proposición no de ley (PNL) se vota en la sesión del jueves, 1 de octubre, y previsiblemente no saldrá adelante por la mayoría de los grupos que sustentan el gobierno valenciano.

Cs quiere que la Generalitat elabore un plan contra la ocupación ilegal para asegurar la devolución de las viviendas, con sanciones más duras para casos en los que las casas se utilicen por mafias para trata sexual o drogas, desalojo exprés, más vigilancia de inmuebles abandonados, asesoramiento y orientación jurídica y colaboración entre policías locales y fuerzas de seguridad del Estado. También insta al Gobierno a promover los cambios legales necesarios, agilizando juicios y permitiendo que las juntas de propietarios puedan tener voz en los desalojos.

Se trata de una propuesta con la que el grupo de Toni Cantó quiere acabar con «una problemática que se sabía que iba a pasar desde que Ximo Puig cedió la Conselleria de Vivienda a un comunista», en referencia al president de la Generalitat y el vicepresidente segundo y responsable de Arquitectura Bioclimática, Rubén Martínez Dalmau. ¿»Cómo va a ver Podemos la ocupación como un problema tras el despliegue policial en Galapagar?», se ha preguntado la diputada de Cs en relación a la casa de Pablo Iglesias, además de recalcar que «no es un problema solo de ricos» y poner como ejemplo los casos de este fin de semana en Chiva y Torrent (Valencia).

Por parte del Botànic, la socialista Sabina Escrig ha sostenido que es un problema de hace años y que para aumentar el parque público de vivienda y luchar contra los desahucios hay que perseguir el fraude fiscal, además de resaltar que en España hay más de 3,5 millones de viviendas vacías y es imposible vigilarlas todas.

Belén Bachero (Compromís) ha lamentado que «la derecha se deje arrastrar por el odio y la aporofobia de Vox» cuando el problema es la especulación y lo importante es poner las viviendas a disposición de los que la necesitan, mientras ha ironizado con la medida «bolivariana y comunista» de intervención estatal que pide Ciudadanos.

Y de Podem, su síndica, Naiara Davó, ha hecho hincapié en que la propuesta de Cs va sobre «ocupación con c y no con k «, porque lo otro es un movimiento social contra la especulación, y ha llamado a poner el foco en las historias de «miles de valencianos, trabajadores humildes condenados a la miseria» que son desahuciados cuando un fondo de inversión se queda con su casa. También ha reprochado a Cs que votara en contra de su propuesta de decreto contra los fondos buitre y ahora salga con esta PNL.

En su réplica, la representante de Cs ha insistido en que lo importante es reforzar la justicia, «la gran abandonada», para erradicar la ocupación ilegal y ha reprochado a los partidos del Botànic que sigan la línea de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y aprobaran el decreto de tanteo y retracto de vivienda «con la nariz tapada».

Del resto de la oposición, el popular Alfredo Castelló ha recordado que el PP ya defendía un plan de este tipo cuando no estaba de «moda» y ha ironizado que el Consell pase «de los ximoanuncios a las ximotrolas » en su política de vivienda, mientras Miguel Pascual (Vox) ha alertado que es un problema real que «impide a la gente irse de vacaciones» y ha lamentado la «falta de rotundidad» de Cs en las sanciones.