Pompeo defiende que China practica una «nueva tiranía» y pide trabajar para «cambiar su comportamiento»
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, ha defendido este jueves que China practica una «nueva tiranía», al tiempo que ha pedido al país norteamericano y a sus aliados que trabajen para «cambiar su comportamiento».
«Como el presidente (Donald) Trump ha dejado muy claro, necesitamos una estrategia que proteja a la economía estadounidense y nuestro modo de vida. El mundo libre debe triunfar sobre esta nueva tiranía», ha dicho Pompeo durante un discurso pronunciado en la Biblioteca Nixon.
A juicio de Pompeo, «debemos admitir nuestra verdad, que debería guiarnos en los años y décadas venideros». «Si queremos tener un siglo XXI libre y no el siglo chino con el que (el presidente de China) Xi Jinping sueña, el viejo paradigma de compromiso con China no funciona», ha señalado. «No debemos continuarlo y no debemos volver a él», ha insistido en su discurso, titulado La China comunista y el futuro del mundo libre .
Asimismo, Pompeo ha deslizado que la competición entre Washington y Pekín es una Guerra Fría moderna y ha detallado que «asegurar las libertades del Partido Comunista Chino es la misión de nuestro tiempo y Estados Unidos está perfectamente posicionado para liderarlo», según ha informado la cadena de televisión CNN.
Aunque ha reconocido las diferencias entre China y la Unión Soviética, sí ha detallado que Pekín comete errores como lo hiciera Moscú, como alienar a los aliados y rechazar los derechos de propiedad y el Estado de Derecho. En este contexto, ha calificado Xi como un «verdadero creyente en una ideología totalitaria en bancarrota».
«La verdad es que nuestras políticas y las de otras naciones libres resucitaron la economía en quiebra de China solo para ver a Pekín morder las manos internacionales que la alimentaban», ha zanjado el secretario de Estado.
Washington dio el miércoles 72 horas a Pekín para que cierre su Consulado General en Houston, la última acción en el marco de la escalada de tensiones en la que se encuentran ambos países.
China y Estados Unidos llevan años inmersos en una escalada de tensión que va desde la guerra comercial hasta las restricciones a periodistas y medios, si bien en los últimos meses se ha disparado a cuenta de la pandemia de coronavirus, de la que Washington culpa directamente a Pekín.