El Congreso recibe el martes a la directora de Sanidad que el 4 de marzo ya alertó del riesgo del Covid-19 para España
La Comisión de Sanidad y Consumo del Congreso recibe este martes a la directora general de Salud Pública, Pilar Aparicio, que el pasado 4 de marzo ya alertó de las consecuencias que podría tener el coronavirus si se instalaba en España. Se trata de una comparecencia solicitada por el PP en abril y que el PSOE ha estado retrasando desde entonces.
Aparicio realizó una entrevista en Radio Euskadi cuatro días antes de la celebración de las manifestaciones del 8 de marzo, por el Día Internacional de la Mujer, en la que mostraba su preocupación y la de su equipo porque el virus se «instalase» en el país. En aquel momento, España contabilizaba 160 contagios y la directora reconoció que ya había sanitarios infectados.
En este sentido, señaló que se encontraba «doblemente» preocupada, porque a estos profesionales se les necesita para «que estén disponibles al cien por cien para atender a la población» y porque «están en contacto con personas vulnerables». «Ya tenemos un fallecido y eso es lo que nos preocupa, que este virus se pueda instalar en nuestra sociedad», insistió durante la entrevista.
Desde entonces, no ha vuelto a aparecer en público. Ni en otras entrevistas ni en las ruedas de prensa que el Gobierno ha llevado a cabo durante todo el estado de alarma.
INTENTO DE BLOQUEO DEL PSOE
Tampoco ha tenido ninguna actividad pública el secretario general de Sanidad, Faustino Blanco, a pesar de ser el número dos de Illa. Algunos medios han asegurado que existen «desavenencias entre ambos». Blanco también comparecerá este martes en el Congreso.
Ese mismo día está citada la directora de la Agencia Española del Medicamento, María Jesús Lamas, que sí participó en algunas de las ruedas de prensa de Sanidad en la Moncloa durante la pandemia y que fue noticia el pasado 20 de abril porque fue multada cuando iba a coger un tren de Madrid a Galicia durante el estado de alarma.
El PP solicitó estas comparecencias hace tres meses, para que estos altos cargos informaran sobre las medidas tomadas por sus departamentos durante la crisis sanitaria. Sin embargo, los socialistas consiguieron ir retrasando su control parlamentario hasta ahora.
Primero fue en la semana del 20 de abril, cuando los socialistas se ausentaron de la reunión de la Mesa en la que se iba a votar la asistencia de estos altos cargos, impidiendo que hubiera quórum para ello. Unos días después, PSOE y Podemos se unieron para votar en contra de esta comparecencia. Alegaron que estas personas darían explicaciones en sede parlamentaria «cuando bajara su volumen de trabajo».