La Iglesia acusa a Áñez de estar «demasiado» preocupada «por colocar a su gente en instituciones públicas»
El presidente de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEPB), monseñor Ricardo Centellas, ha lanzado duras críticas este domingo contra la autoproclamada presidente interina del país, Jeanine Áñez, a quien acusa de estar «demasiado» pendiente de «colocar a su gente en instituciones públicas».
En una ceremonia religiosa con motivo del Día del Periodista Boliviano, Centellas también ha criticado el reciente decreto del Gobierno que autoriza el uso de semillas transgénicas para el cultivo de maíz, caña de azúcar, algodón, trigo y soja, y ha pedido «averiguar» la verdad que se esconde detrás de esta nueva ley.
«No podemos pasar por alto que en Bolivia el Gobierno actual saca un decreto sobre transgénicos y hay que averiguar cuál es la verdad detrás de este decreto. Hace poco aparece un narcojet, cuál es la verdad detrás de esta acción del narcotráfico», se ha preguntado durante su homilía, de la que se ha hecho eco el portal boliviano Primera Línea Noticias.
«El Gobierno no puede callar, tiene que explicarnos a los bolivianos qué es lo que pasa, un gobierno de transición que se preocupa demasiado por colocar a su gente en instituciones públicas no es un gobierno de transición», ha añadido.
En ese sentido, el también arzobispo de Sucre se ha unido a las críticas de algunos sectores de la sociedad boliviana que acusan a Áñez de querer perpetuarse en el poder, más después de que anunciara su candidatura para las próximas elecciones, pese a que un principio aseguró que no lo haría.
Centellas ha pedido a la prensa que se mantenga alerta ya que «el periodismo tiene el trabajo de desenmascarar esta realidad», pues «los bolivianos tienen que saber exactamente si a este Gobierno le interesa la vida», tal y como dice en su «discurso», ya que «por detrás no obra así».
«No podemos vivir de intenciones, no son la verdad y la verdad son los hechos, y ahí está el periodismo», ha apuntado el religioso en relación a las promesas incumplidas del Gobierno de conseguir más respiradores y camas para las instalaciones de terapia intensiva en donde se encuentran algunos de los 2.556 casos positivos por Covid-19 que el país ha registrado junto a 118 decesos.