Uno de cada dos ensayos clínicos de la industria farmacéutica innovadora se centra en Oncología, según Farmaindustria
Uno de cada dos ensayos clínicos promovidos por las compañías farmacéuticas innovadoras se centran en el área oncológica, según los últimos datos del Proyecto BEST , la iniciativa de Farmaindustria para el fomento de la investigación clínica en España.
Cada 4 de febrero se conmemora la lucha contra el cáncer. Para 2020 se prevé que en España se superen los 277.300 pacientes diagnosticados con un tumor (160.000 hombres y 117.000 mujeres), y se estima que para 2040 serán más de 29 millones los nuevos casos anuales diagnosticados en todo el mundo, según cifras de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM).
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, ha cerrado 2019 con 309 autorizaciones de ensayos clínicos para cáncer. Además, hay más de 1.800 nuevos medicamentos en desarrollo para estas patologías en el mundo que también se deben a las compañías farmacéuticas.
La inversión en medicamentos oncológicos en España (no solo innovadores) supuso 1.862 millones de euros, según datos de cierre de 2018 facilitados por la Dirección General de Cartera Básica y Farmacia del Ministerio de Sanidad. Esta cifra representa alrededor del 10 por ciento del gasto farmacéutico público y el 2,8 por ciento del gasto sanitario público. Estos porcentajes son inferiores a las cifras que se manejaban hace un lustro, cuando eran menos los casos de cáncer diagnosticados y había menos opciones terapéuticas disponibles.
«El cáncer es uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan las sociedades modernas, y la industria farmacéutica se ha convertido en un aliado estratégico para los sistemas sanitarios para poder hacerle frente», ha señalado el director general de Farmaindustria, Humberto Arnés.
Como desafío, Arnés apunta que «los pacientes oncológicos puedan tener acceso a las innovaciones disponibles para cada patología en igualdad de condiciones en todo el territorio nacional y así asegurar la mayor calidad de la prestación farmacéutica en todo el Sistema Nacional de Salud (SNS)».