Erdogan reanudará la ofensiva contra los kurdos si no abandonan la zona de seguridad en el plazo acordado
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha avisado a las milicias kurdas de que reanudará su ofensiva contra ellas en el norte de Siria si no abandonan en el plazo acordado de cinco días la zona de seguridad acordada en la tregua pactada este jueves.
En su primera comparecencia ante los medios tras el alto el fuego, Erdogan ha confirmado una vez más que la zona de seguridad acordada tras el armisticio en la frontera turco-siria abarcará 440 kilómetros de largo, hasta la frontera iraquí, y se adentrará 32 kilómetros en suelo sirio.
Asimismo, el presidente turco ha ratificado el plazo de «120 horas» para la retirada de las milicias kurdas, con el matiz de que las fuerzas turcas permanecerán en la zona «hasta que esos terroristas», como describe el presidente a los kurdos, «se hayan marchado», según recoge Gazete Yolculuk .
Erdogan ha explicado también que «no hay constancia» de enfrentamientos a gran escala este viernes, aunque residentes de la zona han denunciado disparos de artillería en parte de la región.
Por último, el presidente turco ha indicado que informó de la ofensiva a su homólogo estadounidense, Donald Trump, el pasado 6 de octubre, es decir, tres días antes de que comenzara.
En este sentido, y sobre la polémica y agresiva misiva que le envió Trump el mismo día que comenzó la ofensiva turca, y en la que el mandatario norteamericano le recomendaba que «no fuera ni de tonto ni de tipo duro», el mandatario turco ha afeado el poco tacto diplomático exhibido por Trump y se ha limitado a responder diciendo que «cuando llegue el momento oportuno, se hará lo que se considere necesario».
Segun fuentes de la cadena británica BBC, la misiva acabó «en la basura».
Ankara inició la Operación Manantial de Paz días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, diera un giro de 180 grados a la alianza de Washington con las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), hasta entonces un aliado clave en la lucha contra Estado Islámico, y retirara sus tropas de la zona.
A lo largo de toda la ofensiva, la mayoría de los países de la comunidad internacional han cargado contra Ankara y han advertido de que la operación podría tener un impacto negativo contra la lucha contra la organización yihadista.