El 90% de los traumatólogos cree que la osteoporosis y las fracturas por fragilidad deben ser una prioridad para el SNS
El 90 por ciento de los traumatólogos comunitarios cree que la osteoporosis y las fracturas por fragilidad deben ser una prioridad para el Sistema Nacional de Salud (SNS), de hecho hasta un 67 por ciento ha señalado que su impacto no está del todo reconocido por sus servicios o sistemas sanitarios.
Estos datos se desprenden de una encuesta europea, elaborada por la biofarmacéutica UCB, realizada a lo largo del mes de agosto, a 401 especialistas en traumatología de 11 países europeos -entre ellos España-, sobre su experiencia en el abordaje de la osteoporosis y las fracturas por fragilidad.
Así, solo el 24 por ciento opina que su sistema sanitario está debidamente preparado para dar apoyo a los pacientes con osteoporosis; mientras que el 91 por ciento coincidió en que un abordaje efectivo puede mejorar los resultados y reducir los costes de la osteoporosis y las fracturas por fragilidad.
«Estos resultados confirman lo que muchos de nosotros ya sabíamos. Cada año que pasa, es probable que más pacientes carezcan de un tratamiento eficaz y queden expuestos a fracturas que acarrean repercusiones de por vida», señala el doctor Kassim Javaid, consultor en reumatología de la Universidad de Oxford (Reino Unido).
En su opinión, son necesarios grupos especializados de asesoramiento normativo que respalden a los profesionales nacionales y a los grupos de pacientes con osteoporosis, «con el fin de implementar métodos eficaces que permitan cerrar esta brecha en el establecimiento de prioridades para los responsables políticos, el personal de Atención Primaria y los pacientes».
Si bien el último paso es prevenir la primera fractura, los servicios coordinados para su atención posterior como son las Unidades de Fracturas (Fracture Liaison Service -FLS-, en inglés), ya han comenzado a cerrar esa brecha en la atención al paciente con osteoporosis. De modo que, ha añadido, «es necesario que los modelos exitosos de estas Unidades de Fractura se expandan a nivel internacional».
«Una vez que se hayan establecido estos sistemas, dichas unidades pueden evolucionar con el objetivo de identificar a los grupos de alto riesgo y prevenir la primera fractura, que es nuestro objetivo primordial», ha concluido.
PACIENTES POCO INFORMADOS
Los especialistas creen que los pacientes no están bien informados sobre la osteoporosis y su impacto. Casi las tres cuartas partes de los especialistas (el 74%) estuvo de acuerdo en que sus pacientes tienen poco o ningún conocimiento sobre la osteoporosis y las fracturas por fragilidad; y los especialistas consideran que los pacientes no son conscientes del aumento del riesgo de sufrir fracturas posteriores; más del 53 por ciento afirmó que sus pacientes creen que el riesgo es escaso o nulo.
Solo el 33 por ciento de los especialistas siente que sus pacientes conocen el impacto a largo plazo de la osteoporosis, y el 53 por ciento coincide en que sus pacientes creen que la osteoporosis y las fracturas por fragilidad le afectarán solo a corto plazo.
Por otro lado, el 84 por ciento de los especialistas cree que es necesaria una mayor sensibilización y concienciación a propósito de la osteoporosis entre los médicos de Atención Primaria; y solo el 32% consideró que estos médicos derivan a tiempo a los pacientes con un presunto diagnóstico de osteoporosis.