El 44% de las empresas españolas prevé una recesión en los próximos cinco años
El 44% de las empresas españolas encuestadas ve posible que se produzca una recesión en los próximos cinco años, aunque la cifra es nueve puntos menor que el promedio europeo (53%) y sitúa a España entre los cinco países más optimistas, en línea con Francia.
Así se desprende del último Informe europeo de pagos elaborado por Intrum, la compañía de gestión de créditos y activos, elaborado tras consultar a 12.000 organizaciones en 29 países, que refleja que las compañías gallegas (52%), las castellano y leonesas (52%) y las madrileñas (51%) son las que actualmente tienen peores previsiones sobre la situación económica del país.
En lado opuesto, las compañías más optimistas son las manchegas, donde apenas un 29% de los empresarios ve factible una recesión en cinco años, seguidas de las andaluzas, vascas y catalanas, con un 38%.
La media europea sitúa en un 53% el porcentaje de empresas que cree que habrá una recesión antes de 2024, siendo las más positivas son las austriacas, ya que el 23% de las empresas de esa nacionalidad no prevé una recesión en los próximos cinco años.
En el extremo opuesto se encuentra Grecia, donde el 93% de las compañías está preocupada por la recesión económica, así como las italianas (84%), especialmente después de que, según el Instituto Nacional de Estadística (Istat), en enero de 2019 el país entrase oficialmente en recesión por tercera vez. El 80% de las empresas lusas también augura una recesión a corto plazo.
REDUCCIÓN DE COSTES
Para afrontar esta incertidumbre, tanto las empresas españolas (38%) como las europeas (45%) prefieren, en primer lugar, establecer un plan de reducción de costes.
Por lo que respecta a las regiones españolas, las empresas de Castilla-La Mancha (84%) son las más partidarias de realizar recortes, seguidas de las murcianas (56%) y las madrileñas (49%), frente al País Vasco (23%) o Castilla y León (26%).
No obstante, la bajada de costes no siempre va unida a un descenso de la contratación de nuevos empleados. De hecho, en España solo el 12% de las organizaciones planea reaccionar a la desaceleración económica con una caída de las contrataciones.
CAUTELA Y PROTECCIÓN ANTE IMPAGOS
El estudio apunta a que la precaución a la hora de endeudarse es una de las máximas que adoptan tres de cada diez empresas españolas para prevenir su negocio de la desaceleración económica, mientras que en Europa recurre a ella el 36% de las organizaciones.
Sin embargo, para asegurar su futuro, las compañías españolas no solo eligen la prevención, también aseguran el pago de sus clientes, especialmente cuando en el último año las pérdidas por impago han aumentado un 1% en las organizaciones españolas hasta alcanzar el 1,7% de sus ingresos anuales.
Por comunidades autónomas, Aragón encabeza el ranking de pérdidas por impagos, con un 3% de sus ingresos, más de un punto por encima de Madrid (1,9%) y Cataluña (1,7%).Las compañías españolas que obtienen menos pérdidas por impagos son las murcianas, a quienes solo les supone un 0,7% de sus ingresos. País Vasco, Castilla y León y Galicia (1,3%) presentan pérdidas cuatro décimas por debajo de la media española.
En cuanto a las medidas para evitar pérdidas, solo dos de cada diez empresas españolas toman medidas para garantizar los pagos de sus clientes y así salvaguardar su negocio de una posible crisis financiera.
En este sentido, las empresas madrileñas (32%) son las que más apuestan por asegurar los pagos, seguida de andaluzas (25%) y aragonesas (21%). La media europea se sitúa en el 28%.
INCREMENTAR LAS VENTAS
Por último, Intrum también ha analizado el porcentaje de empresas que buscan ser competentes en un mercado debilitado incrementando sus ventas. El 29% de las empresas europeas plantea afrontar una posible recesión de este modo, en contraste con el 16% de las compañías españolas.
De hecho, solo 10 de las 17 comunidades autónomas encuestadas hacen referencia a las ventas como solución para hacer prosperar su negocio ante una recesión.
De ellas, las compañías aragonesas (31%) y catalanas (27%) son las más propensas a reaccionar a las dificultades intentando aumentar sus ventas, frente al 5% de las castellano y leonesas o el 8% de las manchegas.