México y EEUU volverán a reunirse en 45 días para evaluar la eficacia del acuerdo migratorio
MADRID, 10
Las delegaciones gubernamentales de México y Estados Unidos volverán a reunirse en 45 días para evaluar la eficacia del acuerdo alcanzado el pasado viernes para reducir la inmigración ilegal a través de la frontera común, según ha informado este lunes el ministro de Exteriores mexicano, Marcelo Ebrard.
Ebrard ha detallado en la rueda de prensa diaria que el acuerdo incluye que, si en 45 días no se ha alcanzado el objetivo fijado en materia migratoria, las partes volverán a reunirse. «Confiamos en que las medidas que propusimos tengan éxito y si no habrá que volver a sentarse, no lo estoy ocultando», ha dicho.
No obstante, ha considerado que, en el caso de que el texto pactado no sea suficiente, habrá que elevar las conversaciones a nivel regional. «Nos comprometimos a que, si no tienen éxito nuestras medidas, nos sentaremos a discutir con Guatemala, Panamá, Brasil… Es un sistema regional», ha defendido.
El canciller mexicano se ha mostrado seguro de que «entre todos» será posible alcanzar la meta planteada por la Administración de Donald Trump, de acuerdo con la prensa local.
Trump había amenazado con imponer desde el 10 de junio un arancel del cinco por ciento a la importación de productos mexicanos, que subiría un cinco por ciento cada mes hasta que cesara la inmigración ilegal. Las partes estuvieron reunidas en Washington la semana pasada para intentar llegar a un acuerdo que finalmente cerraron el viernes.
Interrogado sobre las conversaciones bilaterales, Ebrard ha confesado que «el recibimiento fue muy duro por parte del vicepresidente de Estados Unidos (Mike Pence) porque el tono era casi de ultimátum».
El acuerdo aún no se conoce al completo, si bien las partes han informado de que México se ha comprometido a desplegar a su recién creada Guardia Nacional en la frontera con Guatemala y a alojar en su territorio a los migrantes que soliciten asilo en Estados Unidos hasta que se resuelva su proceso.
El flujo migratorio hacia Estados Unidos volvió al debate político el pasado mes de octubre, cuando miles de centroamericanos comenzaron a marchar en caravana desde el Triángulo Norte hacia el país norteamericano atravesando México.
Trump llegó a amenazar con cerrar la frontera con México y cortar la ayuda estadounidense a El Salvador, Guatemala y Honduras países emisores. El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, por su parte, ha propuesto una especie de Plan Marshall para Centroamérica.