Sánchez ofrece a los empresarios españoles en Cuba apoyo y financiación
Confía en que también los Reyes pueden hacer una «visita oficial» con motivo del 500 aniversario de la fundación de La Habana
LA HABANA, 23 (de la enviada especial de EUROPA PRESS Carolina Jiménez)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este viernes ante un centenar de empresarios españoles que, durante su reunión de este jueves con el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, apreció un «impulso reformista» y ha confiado en que en el debate sobre la nueva Constitución se aclaren algunos asuntos sobre la actividad económica. «Estamos expectantes», ha dicho.
Sánchez ha garantizado a los empresarios el apoyo del Gobierno «dentro de las circunstancias tan difíciles y tan complejas que atraviesa el país», les ha relatado que Díaz-Canel se comprometió a resolver el problema de los impagos a empresas españolas y ha detallado las líneas de financiación con las que pueden contar.
En concreto, ha señalado que Cofides va a aumentar su aportación a 40 millones de euros, se ha referido al fondo de contravalor de 415 millones de euros creado como consecuencia de la condonación de deuda del año 2016 y al que se quiere «dar un impulso» y a la reapertura, por parte de CESCE, de la línea para cubrir los impagos que está en 30 millones de euros.
Tanto el presidente de la Cámara de Comercio, José Luis Bonet, como el de la CEOE, Antonio Garamendi, que se ha estrenado en La Habana en su nuevo cargo, han agradecido expresamente a Sánchez su presencia para apoyar a los empresarios españoles y también han apreciado un compromiso del gobierno cubano para avanzar hacia «un modelo de crecimiento».
Para Garamendi, el proceso de reformas es «lento y no siempre exento de problemas, pero sin duda positivo» y los empresarios españoles pueden contribuir poniendo a disposición de las autoridades cubanas sus conocimientos para «mejorar el clima de negocios», que es una de sus prioridades.
La adaptación de los instrumentos de financiación, los impagos del Gobierno cubano a las empresas españolas, la seguridad jurídica, el impulso al fondo de contravalor y un apoyo institucional continuado y firme es lo que los empresarios han pedido a Sánchez. «España tiene con Cuba un compromiso firme que no depende de coyunturas», ha dicho Bonet, sino que se sustenta en afinidades y «valores compartidos».
GARCÍA-LEGAZ Y SORIA, ENTRE LOS ASISTENTES
También ha puesto voz a las necesidades empresariales el ex secretario de Estado de Comercio y hoy presidente de la sección española del Comité Empresarial Hispano-cubano, Jaime García-Legaz. Entre los asistentes también ha estado el exministro popular José Manuel Soria, que tras dejar el Gobierno fundó una empresa para asesorar a otras compañías.
Sánchez ha garantizado a los empresarios el compromiso institucional, ha avanzado que a lo largo de 2019 viajarán a Cuba más ministros y ha confiado en que también los Reyes pueden hacer una «visita oficial» con motivo del 500 aniversario de la fundación de La Habana. «Será, no voy a decir la guinda, pero sí una visibilización contundente de lo que representa Cuba para España, que es muy importante», ha dicho.
Sánchez ha lamentado que, en los últimos años, ha habido tres países que han adelantado a España en la relación económica con Cuba «como consecuencia de la ausencia de liderazgo político e institucional». «No porque sean más competitivos que nosotros sino porque hemos trasladado una suerte de dejadez y de poca importancia a las relaciones con Cuba», ha dicho.
Además, ha relatado que le planteó a Díaz-Canel que España quiere estar presente «en algún gran proyecto en Cuba» y se llevó la conclusión de que los grandes objetivos que se plantea Cuba coinciden con sectores en los que las empresas españolas son líderes o pugnan por serlo, como la construcción y rehabilitación de viviendas, las infraestructuras, las energías renovables, los ferrocarriles o la gestión aeroportuaria.
De hecho, ha expresado el interés de AENA («empresas españolas de referencia pública») en participar en gestión de aeropuertos. También ha incidido en el potencial de las empresas agroalimentarias, una industria muy potente en España.