Urólogos del Hospital del Mar prueban una nueva técnica de ganglio en cáncer de próstata
Detecta células tumorales en ganglios y evita su extirpación cuando no hay
BARCELONA, 25
Urólogos del Hospital del Mar de Barcelona han demostrado la utilidad de una nueva técnica, usada por primera vez en España, del ganglio centinela en el tratamiento quirúrgico del cáncer de próstata, que evita extirpar todos los ganglios linfáticos de la zona y reduce los problemas asociados a esta cirugía.
Este método –que se utiliza con buenos resultados en otros tipos de tumores, como de mama y melanomas– consiste en inyectar en el tumor una molécula radioactiva o un colorante que drena por los conductores linfáticos hacia los ganglios linfáticos y permite localizar el ganglio centinela, que es donde hay más probabilidad de recibir células tumorales.
Una vez localizado, se extrae y se evalúa para determinar si hay células tumorales: si las hay, se extirpa el resto de los ganglios asociados (linfadenectomía) para evitar que la enfermedad se extienda a otras partes del cuerpo.
«La filosofía es ser más precisos, pinchar solo el tumor y encontrar el ganglio centinela. Hasta ahora se pinchaba toda la próstata y la precisión del ganglio centinela no era lo suficientemente buena», según el promotor del estudio, Lluís Fumadó, que ha destacado que es una iniciativa que evalúan pocos centros en Europa.
Los expertos del Hospital del Mar han estudiado la utilidad de esta técnica en una treintena de casos, y en 16 ya tienen resultados definitivos: ningún otro ganglio estaba afectado en el 100% de los pacientes en que el ganglio centinela no contenía células tumorales.
Si se consolidan estos resultados, se activará la segunda fase del estudio, en la que, si el ganglio centinela resulta negativo, se evitará extirpar todos los ganglios linfáticos cercanos a la próstata, reduciendo problemas asociados como el linfoedema, lesiones en venas, arterias y nervios de la región de la pelvis, que pueden afectar al aparato motor o provocar trombosis.
«La cirugía será menos agresiva, con menos morbilidad y complicaciones quirúrgicas», ha destacado el urólogo y miembro del equipo investigador José María Abascal, y ha añadido que también mejorará el postoperatorio.
Para esta técnica, los urólogos usan imágenes de resonancia magnética (RM) para orientarse e inyectar directamente el marcador (radiotrazador), en la zona del tumor, y con este método obtienen «una mejor estadificación del paciente, una mejor definición de la enfermedad, y si éste tiene o no metástasis linfática», según Fumadó.
El cáncer de próstata es el segundo más común en hombres en todo el mundo y el primero en Europa, según la OMS, y en Catalunya se detectaron 5.070 casos nuevos en 2017 y se registraron cerca de 800 muertes por cáncer de próstata.