Urkullu se empeñará este curso en avanzar en el cumplimiento del Estatuto mediante un calendario con el Gobierno de PSOE
BILBAO, 19
El lehendakari, Iñigo Urkullu, marcará este jueves como uno de los objetivos prioritarios de su Gobierno para el nuevo curso político avanzar en el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika y establecer un calendario con el Ejecutivo de Pedro Sánchez para hacer efectivo el traspaso de las competencias pendientes de transferir, cifradas en un total de 37.
Urkullu insistirá, además, en la necesidad de ensanchar los acuerdos alcanzados en la ponencia de autogobierno del Parlamento Vasco para «afrontar con éxito» la actualización del texto estatutario en Euskadi a través del consenso de una «propuesta institucional viable».
El lehendakari comenzará este jueves a las 9.30 horas su discurso en el pleno de política general del Parlamento Vasco, que estará estructurado en tres partes: la visión general de la coyuntura actual, el balance de la acción del Gobierno en el ecuador de la legislatura y los retos principales de futuro.
El documento de su intervención constará de unas 25 páginas, y el 80% estará destinado a detallar la gestión del Ejecutivo en el curso pasado –a mitad de legislatura considera que ha habido un alto grado de cumplimiento del programa de Gobierno– y a los proyectos que perfila para el próximo, según han informado a Europa Press fuentes del Ejecutivo vasco.
El lehendakari abordará el reto del autogobierno con la prioridad de avanzar en el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika. Para ello, espera que el Ejecutivo de Pedro Sánchez, al que atribuye un mayor talante para abordar estas cuestiones que el de Mariano Rajoy, establezca un calendario para materializar todas las transferencias previstas en el Estatuto de 1979, todavía «sin cumplir».
Iñigo Urkullu, que no pretende interferir en el debate de los diferentes grupos del Parlamento Vasco para lograr una reforma estatutaria, está convencido de que «la búsqueda de la concordia no ha hecho más que empezar».
Por ello, considera que, tras el acuerdo alcanzado entre PNV y EH Bildu sobre las bases de un nuevo estatus, es posible «ensanchar» los consensos porque «se dan las condiciones para afrontar con éxito la actualización de nuestro autogobierno, consensuar una propuesta institucional viable, adaptada a los tiempos y a los desafíos que enfrenta la convivencia».
Además, Urkullu realizará un emplazamiento al Estado a reconocer su «pluralidad nacional» como manera de encarar de forma constructiva «la crisis» por la que atraviesa. De esta forma, le instará a «asumir su pluralidad interna, a aceptar su diversidad territorial» y, en concreto, a «reconocer la realidad nacional de Euskadi» como comunidad «singular» con «capacidad para formular propuestas propias de autogobierno, internamente negociadas y consensuadas».
Otros de los retos principales que se marca el lehendakari en el próximo curso son los de lograr reducir el desempleo por debajo del 10% en 2020, situar a Euskadi en los primeros lugares del mundo en materia de igualdad de género y bajar la tasa de pobreza en un 20%.
MOMENTOS COMPLICADOS
El Gobierno Vasco afronta este curso político en una situación complicada, según han reconocido los propios representantes del Ejecutivo, al encontrarse en minoría y sin tener garantizado el apoyo del PP, después de que el PNV respaldara la moción de censura contra Mariano Rajoy, que aupó a Pedro Sánchez a la presidencia del Ejecutivo.
Las dificultades se acrecientan con la cercanía de las elecciones municipales y forales, previstas para mayo de 2019, y la necesidad de apoyos para sacar adelante los Presupuestos para Euskadi del próximo año.
En todo caso, ésta la primera vez que se celebra un pleno de política general con ETA ya disuelta «con carácter unilateral, efectivo y definitivo». Con este objetivo ya cumplido, el Gobierno Vasco pretende ahora profundizar en la cooperación con las víctimas del terrorismo; promover las previsiones de la Declaración de Bertiz sobre «la injusticia del daño causado por la violencia y la modificación de la política penitenciaria»; y promover, a través del Instituto Gogora, «el más amplio consenso en las políticas de memoria».
Tras la intervención del lehendakari, que se prolongará durante poco menos de hora y media, se suspenderá la sesión, para reanudarse a las 14.30 horas, con el turno de los grupos.
NUEVO ESTATUS
Aunque el debate del nuevo estatus estará presente en el debate, las diferentes formaciones, en principio, no tienen intención de centrar en él sus intervenciones, según han manifestado a Europa Press.
Las grupos parlamentarios son conscientes de que ahora es la comisión de expertos la que debe trabajar en la elaboración de un texto articulado, y éste no tendrá preparado el documento hasta antes del próximo verano, en todo caso no antes de los comicios de mayo.
Este texto encomendado al comité de juristas podrá ser asumido por uno o más grupos como proposición de Ley para comenzar su andadura parlamentaria. Es en el trámite de enmiendas donde se espera que pueda haber nuevos acuerdos entre los diferentes grupos.
OTRAS RECLAMACIONES
La portavoz de EH Bildu en el Parlamento Vasco, Maddalen Iriarte, planteará mañana que el Gobierno de Iñigo Urkullu utilice sus competencias para «incrementar los niveles de bienestar de los ciudadanos», con medidas como el incremento de los complementos a las pensiones más bajas, el apoyo a la industria y el empleo, o el fin de los «recortes» en sanidad y educación.
Además, le pedirá que adopte decisiones para acabar con la «precariedad». Frente al «conformismo» del lehendakari y de sus políticas, planteará medidas concretas para «mejorar la vida de la gente».
En este sentido, destacará la importancia de las bases acordadas por el PNV y EH Bildu para un nuevo estatus, al considerar que abren la puerta a incrementar los niveles de «bienestar y democracia» en Euskadi.
Por su parte, el portavoz de Elkarrekin Podemos, Lander Martínez, propondrá, «ante un Gobierno Vasco sin ideas, las soluciones que necesita la Euskadi real en materia de empleo, vivienda, juventud e igualdad».
Martínez pretende interpelar, «con dureza», a Iñigo Urkullu sobre «los fracasos» de su legislatura como «la Ley de RGI, la destrucción de empleo, la situación de la juventud y las irregularidades en las OPE de Osakidetza».
Otro de los objetivos de Elkarrekin Podemos en el nuevo curso político será «la lucha contra la corrupción», y en materia de autogobierno, insistirá en que PNV y EH Bildu abandonen «maximalismos» para ampliar el consenso.
La secretaria general del PSE-EE, Idoia Mendia, emplazará a los distintos grupos a lograr «acuerdos amplios» que reflejen la pluralidad de la sociedad vasca para «construir país», como, por ejemplo, en materia de empleo, en la lucha contra el fraude laboral, el diálogo social, la RGI, igualdad o emancipación de los jóvenes.
Los socialistas incidirán en que su presencia en el Gobierno Vasco, garantiza que éste se centre en las preocupaciones reales de los ciudadanos, y llamará a los partidos de la oposición a acordar también los Presupuestos.
Por último, el presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, subrayará «el cambio de escenario político» que se ha producido en los últimos meses. Para recordar que, mientras existe una nueva mayoría en España, después de que Mariano Rajoy haya sido desalojado del Gobierno con el apoyo del PNV, en Euskadi los jeltzales han pactado con EH Bildu, «en clave soberanista y excluyente, el proyecto de convivencia más importante», como es el futuro Estatuto.
Alonso pondrá en valor el apoyo que los populares han dado al Gobierno Vasco estos dos pasados años, al facilitar la aprobación de Presupuestos, lo que ha redundado en la estabilidad institucional, y los «dos malos años» que vienen ahora, después de «la ruptura de puentes» del PNV con el PP, y los consensos que ha alcanzado con la coalición soberanista.