Podemos quiere una votación del Congreso sobre las sanciones de la UE a Hungría para que el PP de Casado se pronuncie
El Grupo Parlamentario Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea ha registrado en el Congreso una Proposición no de Ley sobre la conveniencia de que la UE abra la un procedimiento sancionador a Hungría por la deriva autoritaria del Gobierno de Viktor Orban, lo que obligaría a los diputados del PP a pronunciarse.
La iniciativa pretende trasladar al Congreso el debate mantenido la semana pasada en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo, donde tres eurodiputados del PP –Carlos Iturgaiz, Gabriel Mato y Pilar Ayuso– votaron en contra de pedir la apertura de este proceso.
El resto de los populares españoles se abstuvieron o no votaron, después de que el Grupo del PPE, a cuya familia política pertenece Orban, diese libertad de voto a sus parlamentarios.
Unidos Podemos quiere que el PP y su líder, Pablo Casado, aclaren en sede parlamentaria «si hubo una consigna desde Madrid» para que los eurodiputados populares no respaldasen el procedimiento contra Hungría. «Hay diputados que querían votar contra la deriva autoritaria de Orban y parece ser que alguien no los dejó», ha dicho el eurodiputado de Podemos Miguel Urban, en declaraciones en el Congreso.
Por su parte, el portavoz de Podemos en la Comisión de Exteriores, Pablo Bustinduy, ha advertido de que «es incomprensible que la derecha española se ubique en el bando de quienes están avalando políticas de lesión de derechos fundamentales», atacando «la libertad de prensa, la libertad de enseñanza, cerrando universidades, haciendo declaraciones abiertamente antisemitas y criminalizando a las personas refugiadas».
«Si la derecha española ha elegido ese bando se lo tiene que explicar a la ciudadanía», ha añadido. Ambos han hecho hincapié en que Hungría es la «punta de lanza de una deriva autoritaria» en Europa, que puede verse también en Polonia y ahora en Italia que «cada vez tiene más fuerza».
Según Bustinduy, el el objetivo de la PNL es que España «emita desde el sur de Europa un mensaje nítido de disposición a liderar un polo democrático» y defienda una idea de Europa «radicalmente diferente a la que defienden desde Bruselas y a la que representa Viktor Orban».
Para ello, el texto de la PNL –que podría tramitarse en el Pleno o bien en la Comisión de Exteriores o en la de la UE– quiere que el Congreso inste al Gobierno a tramitar con celeridad el proceso para que el Consejo de la UE constate el riesgo de violación de Derechos Humanos y a trabajar con el resto de Gobiernos para garantizar la mayoría suficiente (cuatro quintos del Consejo) para tramitar la solicitud del Parlamento Europeo.
No obstante, la adopción de sanciones –incluida la posibilidad de quitarle a Hungría sus derechos de voto en el Consejo– requiere unanimidad de los Estados, y Polonia, que también tiene abierto un procedimiento por parte de la Comisión, ha dejado claro que no las apoyará.
El texto de la PNL también pide al Gobierno que informe a la Cámara en un plazo de tres meses sobre la evolución del expediente.