El Consejo General de Dentistas avisa de los peligros para la salud de someterse a tratamientos dentales en otros países
El Consejo General de Dentistas ha avisado de los peligros que para la salud puede tener someterse a tratamientos dentales en otros países, después de que estén proliferando negocios de turismo dental en el que se ofrecen packs completos de 3 o 4 días que incluyen estas terapias, así como los traslados desde el aeropuerto y el hotel.
Asimismo, según ha informado el organismo, las empresas que lo organizan aseguran que el personal que trabaja en estas clínicas está altamente cualificado y que sus tratamientos son los más baratos, por ejemplo, implantes desde 350 euros y coronas por 150 euros.
En concreto, el procedimiento para elegir el tratamiento consiste en que el cliente debe enviar por correo electrónico una ortopantomografía reciente y explicar sus problemas bucodentales. A partir de ahí, la clínica decidirá el tratamiento que precise, sin verle antes en ningún momento. En este apartado apuntan que el tratamiento «no será cien por cien exacto» hasta que no vean al paciente en persona, lo que puede aumentar el coste del mismo.
Una vez aceptado el tratamiento propuesto, se elige el alojamiento, el cual debe estar entre las opciones que propone la clínica. Una vez allí, el cliente será llevado a la clínica, donde se le realizará el tratamiento y, al finalizar el mismo, le comunican lo que deberá hacer para su correcto mantenimiento, pero no habrá revisiones posteriores.
«Desconocemos si estos establecimientos cumplen con todos los requisitos sanitarios y legales que precisa una clínica dental, y tampoco sabemos si las personas que trabajan en ellas tienen la formación y la experiencia necesaria para trabajar sobre la boca de los pacientes», ha señalado el presidente del Consejo General de Dentistas, Óscar Castro Reino.
A su juicio, es una «temeridad» realizarse un tratamiento odontológico sin haber visitado personalmente al dentista. «Antes de llevar a cabo cualquier tratamiento, el profesional debe hacer una exhaustiva revisión de la cavidad oral del paciente, estudiar su caso de manera minuciosa y elegir la solución más adecuada a su situación. Decidir un tratamiento a partir de una radiografía enviada por correo electrónico y de las respuestas a un cuestionario es asumir un grave riesgo», ha añadido.
Por ello, Castro ha solicitado a los ciudadanos que sean «cautos» y no se «dejen engañar» con mensajes publicitarios que prometen tratamientos dentales a precios «irrisorios», ya que pueden derivar en «graves problemas» para su salud, como se está viendo actualmente con el cierre de iDental. Además, prosigue, si surge alguna complicación con la financiación o una mala praxis tendrán que iniciar un procedimiento legal en un país extranjero, donde la normativa sanitaria, aseguradora y de responsabilidad civil es diferente a la española.