Michavila augura que «veremos a Sánchez denostado como a sus predecesores» y defiende el equilibrio de la monarquía
VALENCIA, 17
El exministro de Justicia José María Michavila ha afirmado este martes que «veremos a Pedro Sánchez denostado como a todos sus predecesores» al frente del Gobierno, y ha defendido que «no hay que escandalizarse, pero sí saberlo y no dejarse llevar». «Hoy la prensa vive de quitar y poner personas y, en esta situación, que haya una institución que condense el equilibrio no es malo».
Michavila ha defendido así el papel de la monarquía en la historia de la democracia española, durante su intervención en el curso de verano Principios y valores constitucionales: vigencia en el XL aniversario de la Constitución de la Universidad Católica de Valencia (UCV), informa la institución académica en un comunicado.
En su discurso, ha sostenido que «objetivamente, las repúblicas no han convenido a España» y que, por contra, «la monarquía ha sido buena para la convivencia de los españoles». «Igual que en Australia, Reino Unido o Canadá, el papel de la monarquía es útil para la democracia en España», ha aseverado.
Para el exministro, «el papel de la Corona tiene sentido porque representa también a las generaciones pasadas, y se asienta y se nutre en el sufragio universal de los siglos anteriores». Ha destacado así que «puede construir la marca de un país, algo que es tan importante en el siglo XXI, y eso se construye haciendo que la corona sea útil que simbolice al pasado y al país y que responda a exigencias éticas de rigor, profesionalización y sacrificio».
En este sentido, Michavila ha asegurado que «los independentistas que buscan cargarse a la monarquía es para que caiga España». Pero ha remarcado que «no hay que dejarse llevar ni por los escándalos ni por los oportunistas: Si en unos años la monarquía sigue sería sano, porque mostraría una estabilidad en España».
Como ejemplo, el ponente ha indicado que «de los 192 países que hay, según la ONU quieren ser democracia, y esta consiste en que la convivencia cívica de los ciudadanos pactan sus instituciones, que pasan también por elegir el jefe del Estado». Por tanto, «la monarquía es una realidad en muchos de los países de mayor bienestar».
«La historia contemporánea ha acabado ya», ha recalcado, para añadir que no sabe «si fue con la caída del muro de Berlín o con la de las Torres Gemelas». En cualquier caso, ha asegurado que «en el 2018 estamos en una edad nueva, y si buscamos un nombre a esta etapa habría que definirlo por aquello que fue el mejor legado de los siglos XIX y XX, que es la democracia».
Y ha enfatizado: «Con sus más y sus menos, es lo más respetuoso para la dignidad de la persona, la libertad de las persona y las conciencias. El mapa del bienestar y del mundo es el de la democracia».
UTILIDAD HISTÓRICA DE LA MONARQUÍA
Michavila también ha hecho un recorrido histórico sobre la «utilidad» histórica de la monarquía y ha recordado que «una primera etapa fue la del estado moderno, cuando se fundamentó una monarquía humanizada que liberó de la autoridad salvaje de los señores feudales. Esta monarquía devino en corrupción por las series de camarillas en torno al poder y porque el soberano confundió su poder terrenal con algo superior».
«La segunda etapa útil se inauguró con el Congreso de Viena, cuando la monarquía constitucional acabó con la carnicería de la Revolución Francesa», sobre la que ha apuntado que «se vio que lo que legitima a la Corona es que la Constitución diga que el pueblo quiere una corona».
Ha defendido así que «el origen de su legitimidad no viene por un poder divino o por la sangre, sino porque lo establece la Constitución» y ha afirmado que «esta transformación tardó en asumirla España, que vivió un siglo XIX y XX muy duro y con muchos rencores». Por todo ello, el extitular de Justicia considera que «una tercera etapa de monarquía útil podría ser la actual».