Se reabre al tráfico Lope de Vega mientras se ultima la jardinería y puesta en servicio de las rampas
La calle Lope de Vega de Santander ha quedado reabierta este viernes al tráfico de vehículos una vez finalizados los trabajos de aglomerado y pintado de la nueva señalización horizontal.
Las obras continuarán todavía unos días más, con la calle abierta ya a la circulación, para ultimar las labores de jardinería e instalación del nuevo mobiliario urbano, así como para la puesta en servicio de las rampas mecánicas.
La previsión es que los dos tramos de rampas instalados en esta calle se pongan en funcionamiento en la segunda quincena del mes de julio, una vez se completen la configuración del sistema electrónico y las pruebas, ha explicado en un comunicado el concejal de Medio Ambiente y Movilidad Sostenible, José Ignacio Quirós.
También continúan las obras en el entorno de Entrehuertas y la Finca Jado, las otras dos zonas de actuación en las que se ha dividido este proyecto, que permitirá unir el Paseo de Pereda con General Dávila a través de tres rampas, dos escaleras mecánicas y un ascensor.
En la calle Lope de Vega las obras han consistido en la instalación de dos rampas mecánicas, una en el tramo comprendido entre las calles Daoiz y Velarde y Bonifaz (de 32,6 metros de longitud), y el segundo desde Bonifaz hasta Santa Lucía (de 34 metros).
Además, se ha renovado el colector de saneamiento desde Santa Lucía hasta Ataúlfo Argenta.
En total, el proyecto de conexión del Paseo de Pereda con General Dávila mediante elementos mecánicos supone una inversión de 1.358.279 euros.
Las obras, que están siendo ejecutadas por Ascan, permitirán salvar un desnivel total de 75 metros y la previsión es que los trabajos en su conjunto estén finalizados en el mes de noviembre.
CARACTERÍSTICAS DEL PROYECTO
El itinerario parte de la calle Lope de Vega, con las dos rampas ya instaladas, y continúa después por el entorno de Entrehuertas con una escalera mecánica que comienza junto a la calle del Sol siguiendo un pasadizo existente en el lindero Oeste de la Iglesia de los Carmelitas.
Después de la escalera, se acondicionará un nuevo espacio estancial que da paso a continuación a una rampa mecánica, junto a una escalinata existente en la actualidad.
Tras ello, se alcanza una zona que el peatón atravesará hasta el acceso al ascensor, que salva un desnivel de 9,62 metros para llegar a una pasarela de hormigón que desembarca en la calle Santa Teresa.
Una vez en la calle Santa Teresa, el peatón recorrerá 40 metro hacia el Este para enlazar con las escaleras mecánicas del Grupo El Carmelo.
Y completando el trazado actual de las escaleras del Grupo El Carmelo hasta General Dávila, se dispondrá una escalera mecánica que acceda hasta la Finca Jado.
Además de la instalación de los elementos mecánicos, el proyecto incluye otras actuaciones en las redes de abastecimiento y saneamiento, entre ellas, la renovación del colector de saneamiento en Lope de Vega.
También abarca la renovación de las aceras en la calle Lope de Vega y Santa Teresa, la pavimentación del nuevo itinerario entre la calle del Sol y Santa Teresa, la creación de nuevas zonas verdes y la plantación de diversas especies de árboles y plantas.