Los bomberos demolerán partes superiores del edificio derrumbado en Madrid para trabajar en cielo abierto
Los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid han cambiado de estrategia a las 18 horas de este miércoles en las labores de búsqueda de los dos obreros sepultado en el edificio derrumbado ayer en la calle del general Martínez Campos de Madrid, procediendo desde ese momento a demoler las partes superiores inestables del inmueble para trabajar en cielo abierto retirando escombros más rápidamente que hasta ahora.
Así lo ha explicado el jefe de los Bomberos del Ayuntamiento, Eugenio Amores, que ha explicado que hasta ahora la estrategia ha sido trabajar retirando los escombros de los dos puntos marcados por los perros policías unas labores dificultosas y lentas por el riesgo de derrumbe del resto del edificio. Pero habida cuenta de que han pasado 24 horas y no han encontrado a los obreros, y los perros tampoco han confirmado dichos puntos marcados, han cambiado de estrategia.
«La realidad es que como consecuencia del hundimiento, en la parte superior se quedan muchos elementos muy inestables que hacen que trabajemos con excesivo riesgo. Eso hace que trabajemos desde el interior y vayamos muy despacio. Pero ahora vamos a proceder a demoler las partes que están en la parte superior en estado inestable para poder empezar a trabajar a cielo abierto. Esto quiere decir que en un momento determinado se van a producir desplomes al intentar desmontar, pero son caídas controladas. Se lo hemos contado a los familiares para que sepan que lo que pretendemos es ganar tiempo, aunque vayamos a realizar un desmontaje, que lleva más riesgo», ha explicado.
De este modo, los bomberos comenzarán montando una potente grúa de grandes dimensiones que ha llegado a las instalaciones con la que desmontarán las plantas sexta y séptima, las más inestables, las que hasta ahora amenazaban con caer sobre los bomberos. Y esperan que tras ello el desescombro avanzará «mucho más rápido y será más fácil que se encuentran a esta personas en menos tiempo posible». «Ahora estamos corriendo una carrera contrarreloj para tener más posibilidades de encontrarlos con vida», ha añadido el jefe municipal de los bomberos.
Luego desmontarán el cajetín del ascensor del edificio con la grúa gigante, cuyo brazo aproximarán lo antes para favorecer mayores condiciones de seguridad. El desmontaje de las partes precarias se realizarán así de forma mecánica, retirando luego un peto y un muro. «Una vez que hayamos hecho es nos acerquemos con la plataforma de la grúa y podemos reconocer el estado exacto en el que se encuentran los elementos estructurales para proceder a trabajar», ha detallado.
En los últimos minutos, según Eugenio Amores, los bomberos han estado trabajando con un brazo articulado propio para allanar el camino a dicha grúa derribando controladamente un moro que amenazaba con caer. Hemos estado trabajando con el brazo articulado nuestro para poder demoler un muro que amenazaba peligro de caer sobre la zona que trabajamos y desmontándolo permitir el campo de acción a la grúa.
En conclusión, el representante de los bomberos ha espera poder pronto trabajar quitando escombros muy rápidamente a cielo abierto y en horizontal desde la planta baja sin nada en las cabezas que amenace la vida de los bomberos. «Así logramos un mayor coste beneficio. Vamos a perder el tiempo para desmontar pero lo vamos a ganar por otro lado», ha finalizado.
Por otro lado, el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, Javier Barbero, ha detallado que se ha decidido cambiar el enfoque de los trabajos porque «el tiempo está apremiando» y los bomberos han planteado que es «muy importante» desplazar las zonas superiores que estén en riesgo para luego trabajar «a fondo» y «desescombrar con mucha mayor rapidez».