Garrido defiende que no está inhabilitado por haber trabajado con Cifuentes y dice que Gabilondo lo hizo con Zapatero

Propone al PSOE que sus diputados firmen su código ético y le invita a trabajar juntos por la regeneración democrática

El presidente en funciones de la Comunidad de Madrid y candidato del PP a presidir el Gobierno regional, Ángel Garrido, ha defendido este viernes que no está «inhabilitado» por haber trabajado con la exdirigente Cristina Cifuentes, recordando que el portavoz del PSOE en la Asamblea, Ángel Gabilondo, lo hizo con José Luis Rodríguez Zapatero, un «mal presidente», y, pese a ello, fue candidato.

«No estoy descalificado por trabajar para una buena presidenta con buena gestión y usted no lo está por haber trabajado con una mal presidente con una mala gestión», ha indicado Garrido en su réplica a Gabilondo, durante la segunda sesión del pleno de investidura que se celebra este viernes.

Así, Garrido ha admitido que Gabilondo es un socialista «moderado» y «con independencia de las políticas» que pueda tener, a su juicio, no sería «un drama» que gobernara. «Pero necesita a Podemos y eso si sería dramático para la Comunidad», ha añadido Garrido, quien también ha dicho que el PSOE «no gusta a los madrileños» porque lleva 23 años sin hacerlo en la Comunidad.

En esta línea, ha comparado a ambos partidos, asegurando que mientras el PP crea empleo, el PSOE lo destruye, o que mientras los populares hacen «crecer a la sociedad» y que prospere, los socialistas lo «hunden». Por eso, ha asegurado que en el fondo, a Gabilondo le tranquiliza que el PP gobierne.

También ha defendido que el PP no está inhabilitado por haber aplaudido a otros presidentes y le ha recordado a Gabilondo que la presidenta andaluza, Susana Díaz, lo hizo a «rabiar» con los expresidentes de la Junta de Andalucía Manuel Chaves y José Antonio Griñán. «Aplaudía tanto que era consejera de uno de los que está sentado en el banquillo por asuntos muy graves. «¿Le inhabilita eso? Creo que no», se ha respondido.

En el capítulo de medidas de regeneración democrática, Gabilondo ha invitado al PSOE a trabajar juntos por un pacto en esta dirección, después de que se lo ofrecieran y ellos no aceptaran «su mano tendida». «No se dedique a trasladar responsabilidad al Gobierno», ha indicado al socialista.

De hecho, les ha recordado que si quieren hablar de financiación ilegal de partidos, el PSOE tiene el caso Filesa, por lo que es una «batalla perdida» y la «única ganada sería la de que todos, los dos grupos mayoritarios», se pusieran a trabajar «en estas medidas» contra la corrupción que «tanto daño» ha hecho a los dos partidos.

Por otro lado, le ha propuesto que todos los diputados de su grupo firmen el código ético que tiene el PP y que obliga a dimitir a los imputados. Asegura que en el caso del PP se ha cumplido «en todos los casos» y que si lo hace el PSOE, les aplaudirá. Así, ha remarcado que los populares trabajan con «transparencia» y «no consienten» la corrupción.

PRESUPUESTO GARANTIZADO

Asimismo, Garrido ha explicado que todas las medidas anunciadas ayer durante su primer discurso de investidura, con la creación de una nueva Consejería de Justicia o la deducción del IRPF para familias que contraten a cuidadores para sus hijos menores de 3 años que no han conseguido plaza en una escuela sostenida con fondos públicos, están cubiertas con el presupuesto de este año.

«Todos los anuncios tendrán cobertura con el presupuesto», ha asegurado, para recordar que este 2018 supera los 19.000 millones de euros y que es un 4,3 por ciento superior al del ejercicio anterior. También tienen respaldo presupuestario el resto de medidas que ya contemplaba el Gobierno aplicar, como la bajada de tasas en escuelas o becas, ha recordado.

En la parte final de su intervención, Garrido también ha tenido palabras para su grupo parlamentario, al que ha dado las gracias por su apoyo, por «el gran y enorme trabajo», que ha sido «intenso, eficaz y basado en un proyecto sólido con propuesta de futuro», que responde a los principios y valores del PP dentro y fuera de las instituciones», y que él mismo reivindica.