PSOE lleva al Congreso el debate de la reforma del euro y exige al Gobierno que escuche a la Cámara
Propone una nueva arquitectura financiera, un seguro de paro común y alimentar con recursos propios al menos la mitad del presupuesto
El PSOE llevará el debate sobre el proceso de reformas en la Unión Europea al Congreso con una interpelación al ministro de Economía, Industria y Competitividad, Román Escolano, prevista para el miércoles, y con el debate en la comisión del ramo de una proposición no de ley en la que reclama al Gobierno que tome en cuenta a la oposición a la hora de definir su postura.
La interpelación al ministro de este miércoles dará lugar a la votación de la consiguiente moción en el próximo Pleno ordinario, tras el trámite de los Presupuestos, que tendrá lugar a finales del presente mes de mayo, previsiblemente el día 29.
En la propuesta que, al día siguiente, irá a la Comisión de Economía, los socialistas buscarán que sea el propio Congreso el que condicione la política española a defender en las instituciones comunitarias, para lo cual proponen más de una treintena de puntos sobre los que articular la llamada reforma de euro.
Ésta está planteada, como señalan en la propuesta, por la necesidad de desarrollar el presupuesto europeo, completar la Unión Económica y Monetaria con la culminación de la Unión Bancaria, el fortalecimiento de un pilar social, la mejora de la gobernanza económica y la armonización fiscal.
IMPUESTOS MEDIOAMBIENTALES A LOS GIGANTES DE INTERNET
En el texto, el PSOE demanda aumentar los recursos propios de la UE, llevando hasta el 1,3% de la Renta Nacional Bruta comunitaria, con nuevos impuestos medioambientales y a multinacionales de Internet, un Impuesto a las Transacciones Financieras y destinando parte de los beneficios del Banco Central Europeo (BCE) a estas cuentas. Estos impuestos nuevos, señala, deberían suponer al menos la mitad de los ingresos totales del presupuesto.
Por otro lado, pide impulsar la armonización y coordinación de la fiscalidad dentro de los países miembros para «evitar la competencia fiscal a la baja» entre los Estados, liderando en foros y organizaciones la lucha contra paraísos fiscales y financiar el Estado del Bienestar.
En este sentido, reclama aprobar la propuesta para una base imponible común y consolidada para las empresas, con tipos mínimos, la incorporación y crear, en la estructura de la Comisión Europea, una Agencia de Fiscalidad Europea con la que evaluar y realizar seguimiento de la política tributaria de los países miembros.
FONDO MONETARIO EUROPEO
Como parte de la reforma de la arquitectura financiera de la UE, el PSOE reclama la creación de un Fondo Monetario Europeo para ejercer, a partir del actual Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), un prestamista de último recurso con el que facilitar los programas de rescate, un mecanismo de resolución de bancos y fijar un Fondo de Garantía de Depósitos común.
Asimismo, pide rechazar cualquier iniciativa que cuestione la solvencia o nivel de riesgo de bonos soberanos o endurezcan sus condiciones para mantenerlos en los balances bancarios, al menos hasta la aprobación de los llamados eurobonos , emisión conjunta de deuda, o los mecanismos de estabilización presupuestaria.
PILAR SOCIAL Y GOBERNANZA
El PSOE también incide en la necesidad de impulsar instrumentos anticíclicos con los que actuar «en caso de shocks asimétricos» sin tener que recurrir a «transferencias permanentes» de Estados, proponiendo un seguro de desempleo europeo o planes de inversión pública.
Asimismo, pide revisar las reglas fiscales, para simplificarlas y hacerlas más transparentes, con «márgenes de maniobra suficientes» para recurrir a la expansión en momentos de crisis, y propone ligar la regla de gasto a la deuda pública, con la posibilidad de aumentar el gasto al incrementar los ingresos.
Por último, propone varias medidas para mejorar la rendición de cuentas por parte del Parlamento Europeo, como la ratificación de todo el comité ejecutivo del BCE, y la publicación de las actas completas de sus reuniones, «en línea con las prácticas de la Reserva Federal (FED)», apuntan.
Además, demanda crear un ministro de Economía y Finanzas que presidiría el futuro Consejo de Gobernadores del Fondo Monetario Europeo y una mejora de la coordinación entre la Eurocámara y los parlamentos nacionales, abriendo la posibilidad a que este ministro comparezca en cada cámara nacional para evaluar los proyectos de planes presupuestarios de los Estados miembros de la zona del euro.