Condenado a dos años de cárcel un hombre por amenazar con pegar un tiro a políticos valencianos en una red social
VALeNCIA, 18
El Juzgado de lo Penal número 2 de ValEncia ha condenado a dos años de cárcel a un hombre por un delito de incitación al odio por amenazar con pegar un tiro a políticos valencianos en el perfil público de una cuenta en una red social en 2016.
El juzgado acuerda la suspensión de la condena con la condición de que el condenado, de 50 años, no vuelva a delinquir y a que participe en un programa formativo sobre delitos violentos y en un curso de formación en derechos humanos y aceptación de la diversidad así como a borrar los contenidos punibles del perfil público empleado.
Así consta en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, tras un juicio por conformidad entre las partes y en el que además se le condenó al pago de una multa de 1.080 euros y se le inhabilitó para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena.
Como denunciantes actuaron José Enrique Aguar, presidente de Contigo Somos Democracia, exportavoz de Cs en la Diputación de Valencia y diputado no adscrito y Carmen Peris, la actual síndica de la corporación provincial por la formación naranja. A cada uno de ellos les indemnizará con 4.000 euros.
Los hechos se remontan al 6 de abril de 2016 cuando el ahora condenado en una red social y, con el fin de «incitar a la violencia» escribió un post en el que insultaba a una serie de políticos valencianos y aseguraba que lo que merecían era «un tiro en la frente, digo en la frente para que me vean la cara. No como sus amigos etarras que lo hacían por la espalda».
Entre los políticos aludidos estaba el alcalde de València, Joan Ribó; representantes de EUPV como Ignacio Blanco; de Podemos, como Fabiola Meco, Antonio Montiel, Ángela Ballester o Txema Guijarro; Aguar y Peris.
En octubre de ese año, en el mismo lugar, refiriéndose a estos dos últimos escribía. «¿Dimitir?. Esos es poco. Si me los dan los elementos necesarios les pego un tiro entre ceja y ceja. Por cierto, por amor a mi tierra lo hago gratis».
El fiscal había calificado los hechos como constitutivos de delito de incitación al odio mientras que la defensa pedía la absolución al no ver infracción penal. En el acto del juicio, llegaron a una cuerdo de conformidad y el juzgado dictó sentencia in voce.