Sanidad y farmacéuticos firman un convenio para que los profesionales informen y detecten casos de violencia de género
La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, y el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, Jesús Aguilar, han suscrito este miércoles un convenio marco de colaboración entre ambas entidades para luchar contra la violencia de género, que contempla, entre otras medidas, un plan de actuación que permita a los profesionales de las oficinas de Farmacia detectar las primeras señales y saber cómo actuar ante un posible caso de esta naturaleza.
Durante la firma de este acuerdo, en un acto en el Ministerio de Sanidad, ambos dirigentes han resaltado que este acuerdo es un «paso adelante más» en la lucha contra la violencia de género, y que este convenio da cumplimiento a las medidas 27 y 157 del Pacto de Estado que se aprobó en septiembre del año pasado.
Estas medidas, ha recordado la ministra, recogen que se realizarán campañas de concienciación social a través de las oficinas de Farmacia, se formará a los profesionales farmacéuticos en materia de violencia contra la mujer y se elaborará y difundirá un protocolo de actuación para el personal farmacéutico, con el fin de que puedan apoyar y acompañar a las mujeres víctimas de violencia de género y actuar ante un posible caso.
«Las farmacias y los farmacéuticos llegáis a todos los rincones y tenéis cercanía, proximidad y confianza con las personas que atendéis, por lo que las víctimas pueden sentirse cómodas para expresar lo que están sufriendo y dar el primer paso para salir de la violencia», ha afirmado Montserrat, asegurando que con este convenio más de 22.000 oficinas de farmacia se convierten en «agentes activos» por una España libre de violencia contra las mujeres.
Esta cercanía y accesibilidad de la Farmacia, según ha destacado el presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, es un factor a tener en cuenta frente a las dificultades añadidas que pueden presentar las mujeres en el ámbito rural en materia de violencia de género.
Como ha recordado, según los datos recogidos en la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia de la Mujer 2013-2016, el lugar de residencia, y en concreto el ámbito rural, puede tener un efecto condicionante a la hora de manifestar y reconocer la existencia de este problema.
En esta línea, la ministra ha insistido en que las mujeres que viven en zonas rurales tienen una «doble discriminación», algo que para Jesús Aguilar la Farmacia puede ayudar a combatir rompiendo el «silencio», «uno de los mayores cómplices del maltrato».