Pepe Álvarez, a Rajoy: «La reforma laboral ha sido un fracaso absoluto y eso no puede ignorarse»
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha replicado este miércoles al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que la reforma laboral de 2012 ha sido un «fracaso absoluto» y le ha pedido que «no ignore» los efectos negativos que ésta ha tenido sobre el mercado laboral: «ínfima» calidad del empleo creado, rebaja «dramática» de los salarios, aumento de la desigualdad y desesperanza entre los jóvenes sobre su futuro.
Álvarez, en declaraciones a Europa Press en la inauguración de un acto organizado la Unión de Técnicos y Cuadros de UGT (UTC-UGT), respondía así a las declaraciones de Rajoy en el Pleno del Congreso asegurando que «la peor forma de pobreza laboral es no tener empleo».
«Para el presidente del Gobierno hay que elegir entre lo malo y lo muy malo y yo espero que eso los ciudadanos lo valoren. Nosotros no queremos escoger entre lo malo y lo muy malo. En realidad la reforma laboral ha sido un fracaso absoluto», ha apuntado Álvarez.
El líder de UGT ha indicado que otros países, como Portugal, no han hecho una reforma laboral como la española y están saliendo de la crisis en mejores condiciones. Por el contrario, ha subrayado, aunque en España están creciendo las grandes fortunas, la riqueza no se está repartiendo.
«Buena parte de que esto sea así viene de la reforma laboral y eso el presidente no lo puede ignorar. Una vez superada la crisis, lo razonable es que un país normal entre en una vía de recuperación de derechos», ha agregado.
«RAJOY DEBERÍA LEERSE LA CONSTITUCIÓN»
Sobre las invitaciones del Gobierno a que los ciudadanos ahorren para su futuro, Álvarez ha instado a Rajoy a «leerse la Constitución» porque, según ha resaltado, «ni la educación ni las pensiones ni la salud ni los derechos sociales» deben descansar sobre el ahorro, pues son derechos que han de garantizarse constitucionalmente.
«Lo que necesitamos es un Gobierno valiente que cobre a los que tienen mucho y que se reparta la riqueza vía pensiones, servicios sociales, educativos o de salud», ha aseverado.
En cuanto a las pensiones, el dirigente sindical ha recordado al Gobierno que para que UGT entre a negociar una reforma del sistema, es «condición sine qua non» volver a la situación existente en 2011 y derogar las dos últimas reformas que se han hecho sin consenso.
Estas reformas, ha denunciado, están haciendo que las pensiones suban una «mierda», el 0,25%, y rebajarán su cuantía a futuro mediante el llamado factor de sosteninilidad. «O se acaba con esto o no habrá acuerdo ni en el diálogo social ni en el Pacto de Toledo», ha advertido.
