Los grupos del Congreso apuestan por una mayor financiación privada de los partidos y buscan acuerdos sobre las fórmulas
Estudian incrementar las desgravaciones fiscales o que se puedan recibir más subvenciones cuantos más fondos particulares se consigan
Los grupos parlamentarios de PP, PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos coinciden en que es conveniente que los partidos políticos reciban más financiación privada y están buscando un acuerdo en el Congreso sobre cuáles serían las mejores fórmulas para conseguir que los particulares hagan más aportaciones económicas a estas organizaciones.
Este es uno de los asuntos en los que está trabajando la subcomisión creada en el seno de la Comisión de Calidad Democrática de la Cámara Baja para hacer recomendaciones destinadas a mejorar el actual régimen de financiación de los partidos políticos.
Los expertos que han comparecido ante la comisión han resaltado que en el sistema político español existe un claro predominio de la financiación pública sobre la privada y todos los partidos están de acuerdo en que los fondos públicos deben mantenerse a un nivel suficiente para garantizar que los partidos puedan cumplir con su función constitucional de canalizar la participación política de los ciudadanos.
Con la crisis económica, los recortes también llegaron a la financiación pública de los partidos políticos y las partida destinada a a los mismos en los Presupuestos Generales del Estado se redujo hasta en un 40%.
IMPLICAR A LOS CIUDADANOS EN LOS PARTIDOS
Los principales partidos argumentan que debe avanzarse hacia un mayor equilibrio entre la financiación pública y la privada, fomentando el peso de esta última y promoviendo así una participación más activa de la ciudadanía en las formaciones políticas, como ya se hace en otros países de nuestro entorno.
Una de las opciones sobre las que hay más consenso es la de reforzar los incentivos fiscales a la financiación de las formaciones políticas, aumentando las desgravaciones por las cuotas de afiliación y las aportaciones a los partidos, que actualmente están fijadas en un 20% con un máximo de 600 euros anuales.
Sin embargo, según pusieron de manifiesto algunos de los comparecientes este es un instrumento que hay que manejar con cuidado porque, supone menos ingresos para el Estado dado que implica una caída en la recaudación.
Unidos Podemos pone pegas al incremento de los incentivos fiscales y defiende la utilización de las nuevas tecnologías para fomentar las microdonaciones mediante pasarelas de pago o los micropréstamos ciudadanos a través de contratos de carácter civil.
PUBLICAR QUIÉN Y CUÁNTO DONA
Además, la mayoría aboga por regular el crowdfunding y por avanzar en la transparencia total obligando a los partidos a publicitar la trazabilidad completa de las aportaciones privadas que reciben, especificando donante, cantidad, fecha, etc…
Tomando ejemplo de lo que se hace en Alemania o Nueva York, Ciudadanos es partidario de introducir la denominada compensación de fondos (matching funds) que consiste en vinculan las subvenciones a los fondos que los partidos hayan obtenido de aportaciones privadas.
Este sistema puede adquirir diversas formas, como la de imponer un límite a las subvenciones públicas que sólo pueda ser sobrepasado si se alcanza cierta cantidad de contribuciones privadas o la de otorgar por cada euro procedente de un particular un euro o fracción en forma de subvención, con los topes que se establezca.
Asimismo, está sobre la mesa la idea de utilizar las subvenciones públicas como instrumento para incentivar determinados comportamientos de las formaciones políticas, primando por ejemplo a los que celebren primarias, tengan órganos paritarios o alcancen determinados niveles de transparencia. Esta fórmula la defienden PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos, pero el PP la rechaza.