El 90% de los productos innovadores es de marcas de fabricante, cuyo consumo crecerá un 2,5%, según Promarca

Larracoechea cree que la falta de apoyo a la innovación de algunas cadenas hace mucho daño a la capacidad de invertir de las marcas

Promarca, asociación que engloba a la mayor parte de los fabricantes de marcas líderes de alimentación, bebidas, droguería y perfumería de España, ha destacado que nueve de cada diez productos innovadores son obra de las marcas de fabricante y que su consumo crecerá en torno a un 2 ó 2,5% en 2018.

Así lo ha afirmado el presidente de dicha asociación, Ignacio Larracoechea, en una entrevista a Europa Press en la que ha explicado que ese incremento de consumo es «realmente importante» en un escenario en el que la población no crece. El responsable de Promarca atribuye sobre todo a las exportaciones y a la innovación ese crecimiento, por lo que «un 2,5% de incremento en una población estancada es un gran resultado».

Larracoechea ha subrayado que los productos innovadores de marcas de fabricante son los «más actuales, más adaptados, más modernos en cada categoría». Además, ha incidido en lo que aportan al empleo, a las exportaciones y al PIB.

En ese sentido, ha defendido que el sector supone el 7,4% del PIB, «uno de los más grandes de la economía de España», y ha trasladado los datos de un estudio de Esade que señala que las marcas de fabricante crean más de un millón de puestos de trabajo en España, y que pagan casi 10.000 millones de euros de impuestos, mientras que la marca de la distribución o marca blanca, 2.000 millones de euros».

El responsable de Promarca ha previsto que las marcas de fabricante van a seguir invirtiendo en I+D, aunque ha atribuido «cierta bajada» en ese sentido a que los fabricantes no consiguen un retorno para sus inversiones, ya que muchas cadenas no ponen a la venta los productos innovadores de las marcas, incluso de aquellas que ya trabajan. En conclusión, determina que eso «desanima» a la inversión.

«Esto es una de las grandes quejas que tenemos en Promarca», ya que cuando determinadas cadenas no apoyan a la innovación hacen «muchísimo daño» a la capacidad de invertir de las marcas, ha apuntado Larracoechea.

LA COMPETENCIA DE LAS MARCAS DE FABRICANTE

Preguntado por las prácticas y condiciones que impiden competir a las marcas de fabricante, Larracoechea señala que antes las marcas eran competidoras entre sí y había una cadena que distribuía los productos. Ahora, la cadena se ha convertido en distribuidora además de competidora, tiene su propia marca y compite con las demás, a veces de manera injusta con prácticas desleales.

Por ejemplo «puede usar una información confidencial que las demás marcas no tienen» debido a que es un distribuidor y puede discriminar a las marcas tanto en espacio, como en la calidad de éste, en los márgenes de precios o en la referenciación de la innovación.

En cualquier caso, ha señalado que «no todas las cadenas lo hacen y que hay algunas que apoyan mucho a las marcas». Otras tienen como «modelo de negocio favorecer su propia marca en contra de las marcas de fabricante. Ahí es cuando se hace daño, la competencia bajo mi juicio es muchas veces desleal e injusta», ha denunciado.

Por otro lado, desde Promarca señalan que el consumo de marcas blancas ha subido en las categorías que se utilizan como «gancho» y en productos frescos o productos como el aceite, la leche, «se han tirado mucho los precios», pero advierten que lleva tres años sin subir.

«Desde el año 2014, la situación es estable, no crece la marca blanca; crece en algunas cadenas y no otras. La situación es un equilibrio entre los dos tipos de marcas», ha explicado Larracoechea, que mantiene que hay sectores en los que crecen las marcas de fabricante, como bebidas, cuidado personal e higiene, «en los que la marca ha recuperado el protagonismo de otros años».

En ese sentido el responsable de la asociación ha relacionado esa situación con que los fabricantes hayan reaccionado con «promociones muy agresivas de precio y ofertas de todo tipo para poder atraer a los consumidores en los momentos tan difíciles de crisis».

Tras estos años incertidumbre económica, espera que ahora pueda «predominar otro tipo de armas de marketing, para poder atraer al consumidor: la innovación, la variedad, la capacidad del consumidor de elegir y no siempre, el precio».

Preguntado por la irrupción de Amazon en el sector, Larracoechea, ha valorado positivamente la entrada de «grandes jugadores» para dinamizar el sector por la mayor competencia. «Esto hace que todos tengan que mejorar su oferta, su habilidad, su precio, su innovación; los efectos son positivos», ha añadido.

REGULACIÓN

En otro orden de cosas, el responsable de Promarca ha valorado positivamente la regulación española con la Ley de la Cadena Alimentaria y el Código de Buenas Prácticas Mercantiles en la contratación alimentaria, ya que regula las relaciones con los distintos eslabones de la cadena de «manera equilibrada y justa», aunque ha señalado que queda camino por recorrer para eliminar las prácticas desleales.

Asimismo, Larracoechea ha concluido que en Europa no existe una legislación que englobe a todos los estados miembros sobre prácticas legales en la cadena de alimentación, pero sí hay una Ley equivalente a la existente en España, que se da en 21 de los 27 países europeos.