La deuda externa de Españ a como acreedor fue de 14.565 millones hasta septiembre, un 3,5% menos que en 2016
La deuda externa ostentada por el Estado español como acreedor alcanzó en los nueve primeros meses del año los 14.565,38 millones de euros, lo que supone un descenso del 3,5% respecto a los 15.099 millones en que se situaba en diciembre de 2016.
Así lo ha avanzado la secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Irene Garrido, durante su comparecencia ante la Comisión de Cooperación Internacional para el Desarrollo del Congreso para explicar el informe relativo a la deuda externa del Estado español como acreedor y las operaciones de reestructuración y reconversión de deuda con Cuba.
Por categorías, la rúbrica más importante se corresponde a la de «otros tipos de deuda» -con un 46% del total-, seguida de la deuda FIEM (30,8%), la comercial (19,9%) y la del Fonprode (3,3%), mientras que en el reparto geográfico siguen destacando Europa e Iberoamérica, con unos pesos relativos del 46,9% y el 22%, respectivamente.
En el ámbito de las reestructuraciones, Garrido ha destacado el acuerdo alcanzado entre Cuba y España, cuya deuda ascendía a 2.444 millones de euros a 31 de octubre de 2015 (fecha de conciliación con las autoridades cubanas) y que estaba íntegramente impagada.
SOLUCIÓN AL «PROBLEMA HISTÓRICO» DE IMPAGO DE CUBA
Garrido ha señalado que este importante volumen suponía un «claro obstáculo» en la profundización de las relaciones bilaterales entre ambos países, motivo por lo que el Gobierno decidió impulsar el proceso de reestructuración de la deuda con este deudor desde un ámbito bilateral para la deuda a corto plazo, y otro multilateral para la de medio y largo plazo.
«El objetivo de estas negociaciones era dar una solución definitiva al problema de la deuda de Cuba con España y a la situación sostenida en el tiempo de acumulación de impagos, de forma que se pudiera proceder a una normalización de las relaciones económicas y financieras bilaterales», ha explicado Garrido.
De esta forma, ha subrayado que los acuerdos sobre operaciones de reestructuración y conversión de deuda con Cuba han dado solución al «problema histórico» de los impagos de la deuda de la isla con España y «fortalecen las relaciones económicas y financieras bilaterales», algo «esencial», dado que el contexto político actual de la isla abrirá sin duda «enormes posibilidades para el trabajo conjunto de los sectores económicos de ambos países».
De igual forma, ha recordado que, en respuesta a una solicitud de las autoridades de la Autoridad Nacional Palestina, el Gobierno acaba de aprobar una reestructuración de su deuda con España, que ascendía a diciembre de 2016 a prácticamente 70 millones de euros, consistente en la concesión de un periodo de carencia adicional de 10 años y la condonación de los intereses de demora devengados.
CONVERSIÓN DE LA DEUDA
En cuanto a la gestión del resto de programas de conversión de deuda vigentes, la tarea estos años ha sido especialmente fructífera. A 31 de diciembre de 2016, España tenía 28 programas de conversión en vigor, que implican una condonación total de 1.260 millones de euros y suponen destinar 882 millones para la financiación de proyectos de desarrollo en los países deudores.
En el ámbito geográfico, los programas se encuentran repartidos prácticamente por igual entre el continente africano y Latinoamérica. Desde una perspectiva sectorial, el destino prioritario de los recursos es la inversión en Educación, habiéndose financiado 127 proyectos por importe de más de 134 millones de euros, seguidos por el sector sanitario (73 millones) y del medio ambiente (62 millones).
En cuanto a la cartera de programas de conversión de deuda en vigor, además de la firma de los dos citados con Cuba, las novedades más relevantes han sido que en 2017 se ha finalizado el programa de conversión de deuda firmado con Perú por importe 20,11 millones de dólares (17,1 millones de euros), tras la inversión de todos los recursos condonados en proyectos en educación.
Además, se ha firmado un programa con la República de Costa de Marfil, a través del cual España condonará la totalidad de la deuda de ese país -unos 102 millones de euros- y que permitirá que se destinen 52 millones para la financiación de proyectos que promuevan su desarrollo.
La número dos de Economía ha destacado que esta iniciativa ha supuesto un «importante hito», ya que se trata del mayor programa de conversión de deuda suscrito hasta la fecha por España con un país de ese continente.
Adicionalmente, el Gobierno ha aprobado un Programa de Conversión de Deuda con la República Democrática del Congo para la condonación de toda su deuda frente a España, que se articula a través de la Iniciativa «Deuda por Salud» del Fondo Mundial de lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria.
Para ello se ha firmado un acuerdo tripartito entre España, la República Democrática del Congo y el Fondo Mundial que establece que los recursos del programa de conversión disponibles para la financiación de proyectos, de 3,4 millones de dólares (2,8 millones de euros), se canalizarán a través del Fondo Mundial que, conjuntamente con las autoridades locales y su estrategia sanitaria, identificará los proyectos a financiar para la lucha contra estas pandemias.
El Ejecutivo ha aprobado también que los programas de conversión de deuda ya vigentes con Camerún y Etiopía pasen a ser gestionados a través de este Fondo Mundial.
