El Gobierno lanza una consulta pública sobre el apagado del 2G y el 3G para liberar espectro radioeléctrico
El Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública ha publicado este miércoles una consulta pública para recoger información y posibles propuestas por parte de operadores, administraciones y otros agentes sobre el futuro apagado de las tecnologías 2G y 3G en España, según ha informado la cartera que dirige Óscar López en un comunicado.
Cabe recordar que el 2G llegó al país hace unos 30 años, en torno a 1995, mientras que el 3G se introdujo en España a comienzos de la década de los 2000, tras las primeras adjudicaciones de espectro radioléctrico para esta tecnología, que disparó la conectividad y el uso de servicios online a través de dispositivos móviles.
De hecho, uno de los objetivos del apagado del 2G y del 3G es liberar espectro radioeléctrico para tecnologías más avanzadas como el 4G o el 5G.
En concreto, su apagado permitirá liberar espectro radioeléctrico en las bandas de 900 y 2.100 megahercios (MHz), el cual podrá reutilizarse para mejorar la cobertura y capacidad del 4G y del 5G para ofrecer «más velocidad, fiabilidad y eficiencia energética».
«La información recabada servirá para realizar una transición ordenada, ya que permitirá definir aspectos como calendarios de apagado por operador y tecnología, planes de migración de servicios y dispositivos 2G y 3G a 4G y 5G, medidas de comunicación y acompañamiento a los usuarios o indicadores para monitorizar el proceso y garantizar la continuidad del 112 (el número de teléfono de emergencias para toda la Unión Europea)», ha detallado Transformación Digital.
También ha señalado que el objetivo es que el proceso garantice la protección del usuario, la coordinación territorial y la transparencia, por lo que se creará un grupo de trabajo y seguimiento para coordinar la transición con operadores y organismos sectoriales, así como con colectivos afectados.
La consulta, que permanecerá abierta hasta el próximo 20 de enero, plantea cuestiones como, por ejemplo, cuál debe ser la estrategia de comunicación prevista en términos de plazos de preaviso, canales, mensajes tipo, campañas o atención a clientes.
También sobre medidas específicas para dispositivos y servicios específicos ( eCall , alarmas, ascensores, dispositivos de geolocalización) y colectivos vulnerables como personas mayores, personas que dependen de teleasistencia, con discapacidad o con barrera idiomática y en zonas rurales.
«Otros países europeos están inmersos en este proceso, ya que estas redes, implantadas hace más de dos décadas, están llegando al final de su ciclo tecnológico. Mantener activas estas tecnologías implica costes elevados, mayor consumo energético y limitaciones de capacidad y seguridad frente a las redes actuales», ha subrayado el Gobierno.



