Dietistas-nutricionistas denuncian su «precaria situación» y piden mejoras en el ámbio de la restauración colectiva
El Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas (CGCODN) ha presentado ante la comisión negociadora del VII Acuerdo Laboral Estatal de Hostelería un informe en el que denuncia la «precaria situación» de estos profesionales, por lo que ha solicitado aplicar «algunas modificaciones» para mejorar y reconocer de forma «más adecuada» su labor.
«La actual redacción del Acuerdo Laboral Estatal de Hostelería (ALEH) no encuadra de manera adecuada al dietista-nutricionista en cuanto a la denominación, el área funcional y el grupo profesional. Esto provoca que los dietistas-nutricionistas que trabajan en la restauración colectiva perciban una retribución salarial que no se corresponde con su nivel de formación y grado de responsabilidad», ha explicado el presidente del CGCODN, Manuel Moñino.
En ese sentido, se ha quejado de que los dietistas-nutricionistas están incluidos en el grupo profesional segundo a pesar de ser «titulados universitarios» que ejercen su trabajo «con total autonomía» en el marco de sus funciones, razón por la que Moñino ha reclamado «ser adscritos en el grupo profesional primero, que corresponde con estas características».
Otra de las medidas que pide el colectivo es denominar de forma «correcta» la profesión, y es que Moñino considera que «la redacción actual de la normativa ALEH provoca confusión entre la figura de dietista-nutricionista (Graduado o Diplomado universitario en Nutrición Humana y Dietética) y la de técnico superior en Dietética (TSD, con Grado Superior de Formación Profesional)», por lo que han solicitado modificar la denominación de dietista a dietista-nutricionista .
Además del informe, el CGCODN ha elaborado un modelo de carta con estas peticiones para que los dietistas-nutricionistas en Restauración Colectiva puedan hacerla llegar a sus enlaces sindicales y solicitar así la mejora de las condiciones laborales mediante la herramienta de la negociación colectiva.
«Desde el Consejo General, y siguiendo las funciones que tenemos en nuestros estatutos, solicitamos y seguiremos reclamando la defensa de los intereses profesionales de los colegiados, en este caso en un ámbito, el de la restauración colectiva y la hostelería, que requiere una especial valoración de nuestro trabajo y una mejora sustancial de las condiciones laborales del colectivo», ha concluido Moñino.
Por su parte, la secretaria del CGCODN, María José Ibáñez, ha reivindicado la importancia de esta figura en el sector, pues la mayoría «ejercen tareas de diseño y supervisión de menús y dietas terapéuticas para escolares, centros hospitalarios, sanitarios y sociosanitarios, en los que la salud de sus usuarios depende en buena medida de la dieta que reciben».
Asimismo, ha lamentado que el área funcional en que se sitúa al dietista-nutricionista es únicamente el de servicios de hostelería, algo que considera insuficiente al no recoger «todo el trabajo» que realizan, incluyendo cocina, restaurante, colectividades y cátering, partes que «son fundamentales además para garantizar el correcto funcionamiento de los servicios de restauración colectiva», razón por la que ha pedido que se les incluya en todas las áreas funcionales en las que ejercen su labor.